La primera jornada de la fase de grupos de la Champions League ha dado para todo. Desde goleadas como la del Salzburgo al Genk (6-2), incógnitas como la de qué va a pasar con este Barcelona -empató a cero ante el Borussia Dortmund-, remontadas para salvar un punto como la del Atlético de Madrid contra la Juventus de Turín, o también derrotas inesperadas como las de Liverpool y Real Madrid.
El conjunto blanco podía caer en París, no era un escenario que nadie se plantease debido a la entidad del rival. Pero lo que muy pocos se esperaban es que lo hiciese por 3-0 y con una imagen tan pobre que se ve traducida en un solo dato: ni un solo tiro a puerta a lo largo de todo el partido. Un equipo apático, sin alma y sin poder poner la excusa de las bajas por los importantes jugadores que presentó en el Parque de los Príncipes, hizo aguas.
Esta derrota es la primer de la temporada oficial para el Real Madrid, pero llega justo en el partido más importante disputado hasta la fecha y con el rival con 'más nombre'. Un golpe en el que son varios los señalados por su bajo rendimiento, errores de bulto tanto puntuales como regulares, falta de intensidad o malas decisiones. En este apartado destacan sobre todo dos figuras: las de Zidane y Courtois.
Zidane
Los dedos acusadores apuntan, primero, en la dirección del técnico galo. Zinedine Zidane firmó una primera etapa en el banquillo merengue sobresaliente tras hacer historia consiguiendo tres Champions League de forma consecutiva. Pero él sabe bien que no se vive del pasado y menos en el Real Madrid. El galo no quiso hacer sangre y culpó a todos de la derrota, pero se le vio apático en lugar de enfadado.
El míster blanco se vio superado en todo momento por Thomas Tuchel. El entrenador del PSG le ganó en preparación del choque, sobre la pizarra y también en el césped. Zizou no supo contrarrestar el planteamiento del alemán... y ese el fue el principio del fin para el Madrid en el Parque de los Príncipes.
Courtois
Si el técnico es el primer señalado, el segundo no es otro que Thibaut Courtois. El portero nunca ha dejado de estar en el punto de mira y es que son muchos los que preferían y prefieren a Keylor Navas. Sin embargo es el ex del Chelsea el que es el actual arquero del Real Madrid, por decisión del club y del cuerpo técnico. El belga no tuvo su noche más afortunada, precisamente el día en el que tenía en frente a Keylor.
Courtois estuvo muy mal en el primer gol y él mismo lo confirmó así en zona mixta: "Estaba colocado para el centro y no me dio tiempo a reaccionar". Pero sí el tanto inicial de Di María entró por su palo, el segundo fue un disparo lejano en el que da la sensación que pudo hacer más. En el tercero, nada que achacarle a él. Aunque sí la poca seguridad que transmite, en estos momentos, bajo los tres palos.
Carvajal
¿Han cambiado a Dani Carvajal? Eso es lo que está pareciendo en este inicio de temporada. El internacional español no es él mismo, ese pitbull que corría la banda derecha de arriba a abajo y de abajo a arriba durante los noventa minutos. Voraz en ataque y cumplidor en defensa. El de Leganés no atraviesa por su mejor momento individual, aunque también puede ser a raíz de la situación que atraviesa el resto.
'El Fídeo' hizo lo que quiso por su banda y de ahí los goles del Paris Saint-Germain en la jornada inaugural de la máxima competición continental. Debe mejorar mucho para volver a ser el mejor lateral derecho del mundo, pero si algo tiene a su favor es esa entrega indudable que le ha llevado a lo más alto.
Militao
Desubicado. El internacional canarinho tenía ante sí la oportunidad de demostrar a Zidane y al madridismo que puede ser más que un relevo de garantías para Sergio Ramos y Varane. Sin embargo, en este primer gran examen como jugador merengue, Militao no estuvo a la altura. El central acusó la falta de ritmo, ya que apenas ha tenido minutos en el inicio de curso, y fue uno de los grandes responsables en el 1-0. El punto de esperanza es que lo que necesita es tiempo y tiene mucho margen de mejora.
Kroos
Si Carvajal no parece él, Toni Kroos lleva meses muy por debajo de su mejor versión. El alemán volvió a verse superado en el centro del campo. Aunque sin balón no dejó de ser él, con el esférico en las botas no parece el mismo de los últimos años. La temporada 2018/2019 ya fue bastante gris para el futbolista y, precisamente, fue esa imagen la que volvió a dejar en París. Debe despertar sino quiere ver de cerca el banquillo.
Lucas Vázquez
El gallego no fue de la partida, pero sí el jugador del que echó mano Zizou para intentar revertir la situación. No es que Lucas Vázquez estuviese especialmente mal, aunque no dejó jugadas eléctricas y de peligro por su banda, pero sí está entre los señalados es por un error de 'alevín'. Si el gol de Benzema no subió al marcador fue porque el de Curtis se encontraba en fuera de juego e inexplicablemente corrió hacia el balón.