Luka Modric ha entrado en la fase final de su recuperación. El centrocampista croata lleva entrenando toda la semana con el resto de sus compañeros, pero en el Real Madrid preocupa una cuestión casi inminente: el próximo parón de selecciones. Croacia ha vuelto a convocar a su estrella, pese a que apenas está superando una lesión que sufrió la última vez que viajó con su país.

Zidane espera que Modric pueda reaparecer esta semana con el equipo, aunque no será este miércoles contra Osasuna. Luka no ha entrado en la convocatoria del técnico galo al igual que Isco, quien se encuentra en una situación similar a la del croata. El objetivo para ambos es el derbi, aunque todo dependerá de su evolución en las dos sesiones previas al choque.

Con el de Osasuna, ya son cuatro partidos que Modric se pierde de forma consecutiva por culpa de la lesión con la que llegó de la última concentración de Croacia. Una lesión muscular en el aductor derecho que le ha impedido volver a jugar desde el pasado 9 de septiembre con su selección. El parón internacional genera miedo en el Madrid por el Virus FIFA, especialmente en el caso de Modric.

De un parón a otro

Croacia le ha convocado pese a que Modric tendrá poco tiempo para recuperar la forma. El Madrid tiene por delante tres compromisos más antes del parón, pero nada asegura que la presencia de Modric vaya a ser destacada. Que viaje con su selección con tan poco rodaje es un riesgo que al Madrid le gustaría evitar, pero no está en su mano. A partir del 6 de octubre será llamado a filas, siendo el líder de su selección.

El problema es que el Madrid ya ha comprobado que Croacia no escatima en esfuerzos con Modric. Es su mejor jugador y quieren que lo juegue todo para poder estar en la próxima Eurocopa. Así ocurrió el último parón, en el que el seleccionador croata forzó a Modric en el segundo partido, pese a que Zidane sí le había reservado contra el Villarreal en la jornada previa al parón. Es la diferencia de cuidado que no gusta al Madrid y que preocupa de cara al mes de octubre.

Quien tiene el poder de decidir es Luka Modric, quien siempre ha sentido un fuerte compromiso con su selección. El Madrid espera que sea el propio croata el que decline viajar con su país, y evitarse de paso largos viajes, para quedarse en Madrid y terminar de recuperarse al cien por cien. Algo similar a lo que hizo Hazard con Bélgica, aunque la diferencia es que él sí llegó lesionado a la concentración. También James declinó ir con Colombia para centrarse en su trabajo con el Madrid para ganarse un hueco con Zidane. Un gesto que gustó en el Madrid y que se espera ahora de Modric por su bien físico.

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