Este Real Madrid baila samba. Vinicius Júnior y Rodrygo Goes son dos de las mayores apuestas que ha hecho el conjunto blanco en lo que va de siglo y ambos están comenzando a demostrar las razones que empujaron a la cúpula madridista a acometer sus fichajes. Contra Osasuna los dos vieron puerta y brillaron con luz propia.
Cuando el Real Madrid salió a la ventana estival del mercado de fichajes 2019 con la necesidad de acometer una revolución, en el seno de la entidad sabían que no podían plantear un proyecto ganador a corto plazo. Los blancos se veían en la necesidad de confeccionar un plan estratégico de futuro, utilizando a los grandes valores del club en la actualidad con gente joven de mucha proyección.
Con esta premisa se plantó el Real Madrid en el mercado el pasado verano. La cúpula del conjunto blanco estaba curtida en la ardua tarea de la captación de talento joven, ya que la política del club en los últimos años había estado enfocada hacia esta área. Martin Odegaard, Álvaro Odriozola Dani Ceballos, Brahim Díaz o Marco Asensio son algunos de los mayores ejemplos de ello.
Estos meses atrás la inversión sería mayor. La temporada 2019/2020 tenía objetivos muy ambiciosos y no se podía escatimar en gasto. Entre los más de 300 millones de euros que gastó el Real Madrid se encontraba Rodrygo, una de las nuevas incorporaciones del primer equipo.
Mismo plan, mismo camino
El brasileño aterrizó en Concha Espina procedente del Santos a cambio de 45 millones de euros. El joven de 18 años seguía los pasos de Vinicius, quien un año antes había llegado por la misma cantidad desde el Flamengo. Dos joyas de máxima proyección con las que el Real Madrid comenzaba a cimentar su equipo del futuro.
En el club se trazó el mismo plan para ambos jugadores: adaptación en el Castilla e incorporación paulatina al primer equipo. Con Júnior salió a la perfección, ya que el jugador deslumbró en el filial y tardó poco en ganarse oportunidades con los mayores a las órdenes de Solari. El cuento acabó con el brasileño echándose a todo un Real Madrid a la espalda y llenando las gradas del Santiago Bernabéu de ilusión.
Rodrygo ha seguido el mismo camino este año y es una de las grandes novedades que más interés genera en la afición merengue. El jugador hizo la pretemporada con el primer equipo y ahora está alternando con el filial madridista.
Destinos cruzados
La consagración de ambos llegó este miércoles; al menos el culmen de su iniciación. Los planetas se alinearon para que los dos brasileños firmaran su gran noche juntos, en un partido en el que dieron el relevo el uno al otro en el minuto 71 y en el que ambos marcaron los dos goles del encuentro.
Vinicius fue el primero en anotar. Lo hizo en el 36. Algo que Rodrygo hizo lo propio en el 72, justo un minuto después de haber salido al campo. Los dos comenzaron a demostrar porqué el Real Madrid se lanzó a por ellos. El futuro del equipo está en manos de ambos, ya que son buques insignia del Madrid de la próxima década.
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