En los últimos días El Clásico que disputarán Real Madrid y Barcelona el próximo sábado 26 de octubre no deja de acaparar la actualidad. La inestabilidad política que se vive en Cataluña está provocando dudas en los máximos dirigentes del fútbol español. Y es que el encuentro entre los dos grandes se jugará en el Camp Nou, algo que preocupa a LaLiga y de lo que se han hecho eco en todo el mundo.
El organismo presidido por Javier Tebas ha solicitado formalmente a la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) que el partido cambie su sede y se dispute en el Santiago Bernabéu. Un imprevisto que no contemplan ni Real Madrid ni Barcelona.
Dentro de todo este baile de sedes, Argentina ha tomado la palabra como recordatorio a lo que sucedió en la final de la Copa Libertadores 2018. Los disturbios que se produjeron en el país obligaron a trasladar el partido fuera, desembarcando finalmente en Europa, concretamente en Madrid.
El icónico diario argentino Olé se ha encargado de bromear sobre esta posibilidad, proponiendo en sus redes sociales que El Clásico se juegue en Buenos Aires. "Devolución de favores", espetaba el medio en su cuenta oficial de Twitter.
Aquel encuentro en Boca Juniors y River Plate terminó juzgándose en la capital española, con decenas de miles de aficionados copando las gradas del Santiago Bernabéu.
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