La jornada 10 es una buena fecha para pasar el primer examen de la temporada. Los equipos ya se han asentado en LaLiga, incluso llegan las primeras destituciones de entrenadores, y han dejado ver qué se puede esperar de cada uno para el resto del año. En el caso del Real Madrid, aunque vive en un examen permanente partido tras partido por su reputación, llega a este fin de semana sin encuentro por la cancelación de El Clásico.
Es llamativo porque justo hace un año también se disputaba un Barça - Real Madrid que sentenciaría a Julen Lopetegui. Un 5-1 que dejaba al Madrid en novena posición y que invita a la retrospección a las últimas cinco temporadas. Los de Zinedine Zidane viven una temporada más igualada que las anteriores y eso se puede vislumbrar por el número de puntos al que llegan los equipos a este fin de semana y porque del primero al séptimo hay una distancia de tres puntos.
Mejora sustancial
Hace un año ese Clásico dejaba al equipo de Concha Espina con 14 puntos y sin entrenador. Una temporada con muchas expectativas después de que el Madrid se alzase con la cuarta Champions League en cinco años. Con el Santiago Bernabéu acostumbrado a llevarse al final de cada temporada al menos un título a la boca, llegaba Julen Lopetegui tras su salida de la Selección antes de empezar el Mundial de Rusia.
La temporada no empezaba con buen pie tras caer en la Supercopa de Europa y, a pesar de que las primeras cinco jornadas de Liga invicto y con una exhibición en Roma, las cosas se empezarían a torcer tras encajar un 3-0 en Sevilla. Julen dejaba la plantilla en la jornada 10 con el mismo número de victorias, cuatro, que de derrotas y el mismo número de goles a favor, 14, que en contra.
Zidane suma a estas alturas 18 puntos, cuatro más que hace justo un año con un partido menos, ha metido dos goles más, 16, y, sobre todo, ha encajado cinco menos, 9. Si este sábado se hubiera jugado El Clásico, habría llegado con menos goles encajados que el Barça, algo que no pasaba a estas alturas de la temporada desde 2016.
La era de Cristiano
La realidad del Real Madrid tras la salida de Cristiano Ronaldo es que le ha costado encontrar el gol. Era evidente que con la salida de uno de los mejores delanteros de la historia iba a afectar al olfato goleador, por lo que si se echa la vista hacia los últimos cinco años, esta segunda etapa de Zidane sale perdiendo.
En la 2017/2018 los blancos tenían dos puntos más, recordando una vez más que esta temporada lleva un partido menos. También había perdido un partido más que este año, dos, concretamente por el partido que disputaba por estas fechas, una derrota en Girona por 2-1. Pero en cuanto a las cifras de goles no hay mucha diferencia. El equipo había marcado tres goles más y había encajado los mismos. Una campaña que terminaría con la Champions número 13 en las vitrinas del Santiago Bernabéu.
Si nos vamos a la 2016-2017, el Real Madrid era líder en la jornada 10 con 24 puntos. Aún no conocía la derrota y la realidad goleadora era bien distinta. Con seis victorias y tres empates, en esa jornada le metería cuatro goles en Vitoria al Alavés para sumar 28 en total. Eso sí, para las críticas hacia la línea defensiva de esta temporada este dato sorprenderá: había encajado un gol más.
Con los mismos puntos llegaba a la misma jornada en la 2015-2016 y cuatro goles menos en su haber. La gran diferencia estaba en la seguridad defensiva que transmitía el equipo de Rafa Benítez por aquel entonces: solo había encajado cuatro goles.
Teniendo en cuenta cómo acabó la etapa del entrenador español, estos registros hay que cogerlos con pinzas. Aprobar el primer examen del curso no te hace aprobar toda la temporada, sobre todo con las dificultades que tienen los equipos de mantenerse equilibrados todo el año. Aún así, estos datos demuestran que Zinedine Zidane ha aprobado este primer tramo de la temporada.