El partido de la cuarta jornada de la Champions League llegó al Santiago Bernabéu para revivir el duelo de hace dos semanas entre el Real Madrid y el Galatasaray. Pero mientras en Estambul los blancos solo vieron puerta una vez, aunque eso sí se llevaron la victoria; el coliseo merengue se ha convertido en un festival desde el principio.
Rodrygo abrió la lata en los primeros compases del encuentro y otra vez el brasileño vio puerta a los pocos minutos para poner el 2-0 en el marcador. Antes de cumplirse el minuto 15 y con el Real Madrid con una ventaja amplía ante los turcos, llegó la primera polémica del partido.
Toni Kroos cayó en el área del Galatasaray después de sufrir un pisotón por un jugador rival. En primera instancia, Felix Zwaye no señaló el punto de penalti, pero nada más salir el esférico del terreno de juego, se llevó la mano al pinganillo y ordenó que no se sacase. Desde el VAR le dijeron que hubo contacto y que debía revisar las imágenes.
Revisión y penalti
El colegiado alemán fue hasta el plasma y después de revisar la acción, volvió al campo y ahí sí, señaló el punto de los once metros. El pisotón se produjo sobre la línea y las imágenes no dejaron lugar a la duda. Así lo consideró también Felix Zwaye y así llegó el tercero de los de Zinedine Zidane antes del cuarto de hora.
Mientras el Santiago Bernabéu coreaba el nombre de Rodrygo Goes para que fuese este el que ejecutase el lanzamiento y pudiese firmar su primer hat-trick con el Real Madrid, fue Sergio Ramos el que cogió el balón y, a lo Panenka, marcó el penalti y puso el 3-0 en el luminoso. Este es el segundo gol del capitán en la Champions esta temporada 2019/2020.
[Más información: Narración del partido entre el Real Madrid y el Galatasaray]