100 millones de euros y más de 10 años han costado que Eden Hazard cumpliera su sueño de vestir la camiseta del Real Madrid. No se puede calcular el número de jugadores que en el inicio de su carrera tuvieran como objetivo defender el escudo madridista. Y tampoco se puede calcular todos los que se han quedado sin cumplir ese sueño.

Hazard lo cumplió y el siguiente objetivo que tiene por delante es liderar al equipo y ser determinante en las grandes citas. Para conseguirlo, no podría tener un mejor entorno. Su relación con Zinedine Zidane le ha acompañado durante toda su carrera y el entrenador del Real Madrid será la clave para conseguir la mejor versión del belga en toda su carrera.

Carreras destinadas a encontrarse

En una entrevista con L'Equipe en la previa de la elección del Balón de Oro 2019, Hazard ha confesado que Zidane fue su ídolo desde su infancia. Afirmaba que después de ver sus vídeos en Youtube, salía con sus hermanos al patio de su casa y trataban de imitar sus regates y sus goles.

También desveló que la primera vez que vio a Zidane fue en el último Mundial y tuvieron una conversación en la que el francés le dijo que fichase por el Real Madrid. Este verano cumplió con esa pretensión y, además, lo hizo para que su ídolo le entrenase. Quizá fue la razón definitiva por la que el belga decidió recalar en el conjunto blanco.

Llega en el mejor momento

La edad y la experiencia son factores importantes a la hora de buscar un líder para tu equipo. Hazard fichó por el Madrid con 28 años, el momento en el que normalmente los jugadores alcanzan su cénit futbolísitco. El nivel de madurez del delantero es tal que después de llevar al Chelsea a una nueva Europa League y tras haber triunfado en Inglaterra.

El belga ha tenido que tirar del equipo en estos últimos años y, aunque el Real Madrid es un gran salto de nivel en comparación con el equipo de Londres, el belga ya está capacitado para asumir la responsabilidad de ser la referencia del conjunto de Zidane. Es el gran reto del francés en esta segunda etapa como entrenador blanco.

Un mes determinante

En la búsqueda de ese mejor nivel de la carrera de Eden Hazard, el próximo mes se antoja clave. Hay dos citas que tiene marcadas en rojo el belga. La primera es el próximo martes frente al PSG. Uno de sus primeros partidos como madridista fue el de la primera vuelta de la fase de grupos de la Champions donde el equipo fue ridiculizado al caer por 3-0. Tomarse la revancha es obligatorio para el de La Louvière.

Y, evidentemente, la segunda gran cita es El Clásico del Camp Nou. Doctorarse ante el Barça y en su casa es la mejor carta de presentación para convencer al madridismo de que es el líder que esperaban. El valón tiene toda la confianza de Zidane para conseguir ese liderazgo que tanto ansía. Ya se han visto destellos cuidando de los más jóvenes y siendo generoso con los penaltis. Pero lo que quiere ver la afición del Santiago Bernabéu son los goles que decidan las grandes citas.

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