La final de Bale en el Santiago Bernabéu: perdón o sentencia en el Madrid
El galés parte como favorito para ser titular en la derecha ante el PSG y se someterá a otro juicio de la afición madridista.
26 noviembre, 2019 11:37El aura de la Champions League puede con todo; así que, ¿por qué no iba a devolver la paz entre el Santiago Bernabéu y Gareth Bale? Se presenta como una empresa difícil, visto lo visto. El galés se llevó una pitada histórica el pasado sábado contra la Real Sociedad, que camufló unos tímidos aplausos que también recibió y que arrojan algo de esperanza respecto a su situación. Hoy puede volver a jugar ante el público madridista que le someterá de nuevo a juicio.
El partido contra el PSG se presenta como una final para Bale; por el calado del partido y por lo que puede suponer para él no imponerse a los pitos. Además, se le presenta la oportunidad de volver a ser titular en casa, algo que no hace desde el pasado 5 de octubre contra el Granada. Rodrygo fue el elegido por Zidane ante la Real y Bale, que ya jugó con Gales de titular, está listo para salir de inicio.
Bale, una opción para el once
Zidane se debate entre tres opciones. La primera sería volver a confiar en Rodrygo, que en su último partido en Champions -ante el Galatasaray y en el Bernabéu- pasó a la historia por su hat-trick. El brasileño ha demostrado estar hecho para las citas grandes y se ha ganado la confianza de todo. Pero Bale aspira a recuperar su sitio por la derecha. En el club siguen confiando en las capacidades del galés quien, en condiciones, puede competir con los mejores del mundo. Que vuelva a su mejor nivel sería una gran noticia para el equipo.
Pero hay una tercera opción que ha ido cogiendo fuerza sobre todo tras el partido contra la Real. El buen momento por el que pasan los cuatro centrocampistas del Madrid (Casemiro, Modric, Kroos y Valverde) puede hacer a Zidane pasar a un 4-4-2 y dar mayor libertad a Hazard en ataque junto a Benzema y alinear a Modric en una posición más adelantada. Esto le permitiría tener mayor control al Madrid ante el PSG, aunque siempre es peligroso probar algo nuevo ante un rival de esta envergadura.
Bale quiere reivindicarse. La polémica sigue viva tras la bandera con la que posó durante el parón de selecciones, para el que se esforzó en llegar pese a no haber jugado antes con el Madrid tras su lesión. Ni el club, ni Zidane, ni el vestuario le han querido dar mayor importancia, mientras el propio Bale se mantiene en silencio. Quiere responder en el campo, como ya empezó a hacer el pasado sábado.
Quiere responder en el campo
Solo jugó 24 minutos contra la Real, pero fueron suficientes para que Bale diera muestras de su calidad. Entre los pitos de parte importante del estadio que recibía cada vez que tocaba la pelota, de sus botas nació tras un gran centro la jugada que acabaría en el gol de Modric. Además, también tuvo la oportunidad de meter tras otra buena acción individual. No fue suficiente para acabar con los pitos, aunque ya se sabe que Bale es un jugador capaz de abstraerse en situaciones así.
Los pitos vienen igual que se van. Bale, que ya está curtido en mil batallas, ha sido capaz de revertir situaciones parecidas en estos seis años que lleva vistiendo la camiseta blanca. Es su año más difícil en el Madrid y su cabeza parece estar más lejos que nunca del combinado merengue, pero sus compañeros insisten en su compromiso. El escenario que se le viene encima no podría ser más propicio para volver a establecer el orden y Zidane parece dispuesto a darle una última oportunidad.