El Real Madrid se veía venir lo de El Clásico desde el momento en el que la Federación anunció la designación arbitral para el partido de este miércoles contra el Barcelona. Dos sospechosos habituales: Alejandro Hernández Hernández y Ricardo De Burgos Bengoetxea. Uno al silbato y el otro en la sala del VAR. Ambos con un amplio historial de escándalos con el conjunto blanco como perjudicado e implicados en varios Clásicos.

Solo hicieron falta 20 minutos para que se confirmaran las peores sospechas del madridismo. Los blancos reclamaron dos penaltis en los que en ambos fue Varane el protagonista. En el minuto 18 recibió un plantillazo de su compatriota Lenglet dentro del área azulgrana que le dejó la marca en el muslo, pero Hernández Hernández se desentendió. Casi de seguido, Varane volvía a ser la víctima esta vez por un agarrón de Rakitic que le tiró al suelo a la salida de un córner. Ni el colegiado ni el VAR vieron infracción en la jugada. El partido acabaría 0-0 y bajo el clamor blanco contra el arbitraje.

Lo de Hernández Hernández viene de lejos y siempre ha creado polémica en los Clásicos. El de este miércoles era su cuarta vez al frente de un partido entre el Barcelona y el Real Madrid, con un balance de una victoria para cada uno y dos empates. También lo iba a ser el febrero pasado en Liga, pero una lesión le apartó dejando su lugar a Undiano Mallenco. Ya sabía lo que era dirigir un Clásico... y hacerlo con polémica, como acabó ocurriendo una vez más.

Los tres Clásicos de la vergüenza

El primer Clásico de Hernández Hernández fue en la temporada 2015/2016. Aquel encuentro, disputado en el Camp Nou, acabó en victoria del Real Madrid por 1-2 tras remontar un gol de Piqué. Sin embargo, el colegiado por poco no acabó con las esperanzas blancas al expulsar a Sergio Ramos y anular a Gareth Bale un gol legal. En la 2016/2017 volvería a dirigir un Clásico. Fue en el Santiago Bernabéu y otra vez Sergio Ramos fue expulsado, esta vez por una dura entrada sobre Leo Messi. Aquel encuentro acabó 2-3 yendo los tres puntos para los azulgranas.

El lío volvería un año después, en la temporada 2017/2018. Hernández Hernández regresaba al Camp Nou y con ello la polémica. El duelo acabó 2-2 y tuvo varias decisiones escandalosas que impidieron el triunfo blanco. Primero dio por válido un gol de Messi que vino precedido de una falta clara de Suárez sobre Varane y luego se 'comería' un claro penalti de Jordi Alba sobre Marcelo. Sergi Roberto fue expulsado al borde del descanso. El balance general del Madrid con él es de 12 victorias, tres empates y seis derrotas en 21 partidos.

Para De Burgos Bengoetxea esta vez fue la tercera en la que se puso al frente del VAR durante un duelo entre Barcelona y Real Madrid tras serlo en la ida y en la vuelta de la eliminatoria copera entre ambos equipos de la temporada pasada y que acabó con el pase de los azulgranas a la final tras empatar 1-1 en el Camp Nou y ganar 0-3 en el Bernabéu (partido que debía arbitrar Hernández Hernández).

Los 'favores' de De Burgos Bengoetxea

Solo una vez dirigió un Clásico y le marcaría para siempre. Fue en 2017 en la ida de la Supercopa de España en el Camp Nou, en uno de los duelos más polémicos que se recuerdan entre ambos pese a que acabó con victoria blanca por 1-3. El colegiado fue el protagonista del partido, sobre todo por una de las decisiones más lamentables que se recuerdan al expulsar a Cristiano Ronaldo, quien le propinó un leve empujón porque el árbitro señaló que simuló una caída cuando fue claramente derribado por Umtiti al borde del área siendo el último hombre. Además, pitó un penalti inexistente de Keylor sobre Suárez.

Tras aquello, De Burgos Bengoetxea tardaría en arbitrar ocho meses otro partido del Madrid, cuyo balance con él es de nueve victorias, dos empates y una derrota. En el club blanco también recuerdan un partido en Mestalla en la temporada 2016/2017. También Cristiano Ronaldo sería su víctima entonces al no pitar un claro penalti sobre el portugués. Mangala, central che, tuvo que ser expulsado por doble amarilla por una dura entrada a Benzema. Tampoco hay que olvidarse de sus 'favores' al Barcelona como cuando expulsó a Diego Llorente y Juankar en un partido contra el Málaga (0-0) o la temporada pasada con el famoso rodillazo de Suárez a Cuéllar, portero del Leganés, que no impidió que su gol subiera al marcador.

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