El Real Madrid disfruta de sus días libres antes de volver al trabajo con la cabeza puesta en el próximo compromiso de La Liga contra el Getafe. A escasos días de que se cierre el 2019, Zidane lo hace con un buen sabor de boca y con los deberes hechos tras haber resuelto un inicio de temporada complicado. El equipo carbura y la filosofía del técnico francés se ha implantado de nuevo.
La primera premisa del Zidane entrenador es contar con todo el equipo. No tiene 11 titulares, sino 16, 17, 18, etc. En las últimas semanas se ha notado más que nunca desde que volviera a ocupar el banquillo blanco. Su plan para ganar La Liga pasa por tener enchufada a la plantilla completa y se ha encargado de ello poco a poco. El final de año ha traído varias sorpresas en forma de jugadores re enchufados a la dinámica.
Vinicius
De no entrar en varias listas a acabar de titular e igualando su pelea con Rodrygo. Vinicius no dejó de ir cuesta abajo desde que comenzara la temporada hasta llegar a un punto de ser prácticamente un habitual descarte en cada partido. Se hablaba de cesiones, de que Rodrygo le había adelantado por la derecha, pero Zidane tenía un plan con él. Le dio su confianza y le hizo saber que la única vía para volver a contar era trabajo y así llegó su oportunidad.
Así llegó al último partido de la temporada contra el Athletic en el que acabó como titular y recordando al Vinicius que se vio la temporada pasada. Su duelo en la rotación está más igualado que nunca con Rodrygo. Vinicius cuenta y Zidane le promete seguir dando oportunidades.
Isco
De olvidado a pieza fija en los grandes partidos del Real Madrid. Lo de Isco pareció un milagro, porque pocos apostaban a que volvería a ser importante. Zidane sí lo hizo. De golpe y porrazo le puso de titular contra el PSG, volviendo al 4-4-2 en rombo y desde entonces ese esquema, con el malagueño en él, se volvió a instalar en las grandes citas como El Clásico.
Lo de Isco no es solo una cuestión de confianza y es que también se ha visto las horas de trabajo que ha puesto en su 'regreso'. Fisicamente está increíble y vuelve a ser ese Isco que aporta mucho en la presión.
Mendy
De mero relevo de Marcelo a mejorar ante su lesión. Zidane quería alguien que peleara con el brasileño por la titularidad y apostó en verano por Ferland Mendy, aunque aquello supusiera la cesión de Reguilón al Sevilla. Mendy ha ido de menos a más. En los primeros partidos se le veía nervioso e impreciso y poco a poco se ha ido quitando esa capa de miedo, en cierta medida, y se ha soltado.
Se ha visto beneficiado por las lesiones de Marcelo, pero hay que decir a favor de Mendy que, en su forma actual, le estaría poniendo muy cara la titularidad a su compañero. Es un puñal en la banda y aunque todavía le hace falta algo de pausa está demostrando que con él puede haber lateral para muchos años.
Militao
De estar sin minutos a contar más que nunca en diciembre. Militao cayó en el olvido de Zidane durante semanas o, al menos, eso parecía. Pero el brasileño encontró en diciembre su fuente de minutos que tanto necesitaba con hasta tres titularidades en seis partidos. Su entrenador ha comprobado que es un central de garantías y un relevo muy a tener en cuenta para Ramos y Varane y así dar un respiro al centro de su zaga. En 2020 sus oportunidades seguirán yendo a más y, para empezar, seguramente vuelva a jugar contra el Getafe por la sanción de Ramos.