El Real Madrid ha hecho oficial este viernes la incorporación de Reinier Jesús, jugador de 18 años que brilló en el Flamengo antes de convertirse en nuevo jugador madridista. Una joya pretendida por grandes clubes del Viejo Continente con la que el club blanco pretende seguir reforzando su política de jóvenes fichajes con vistas al futuro.
El delantero, que cumplió la mayoría de edad el 19 de enero de este año, llega al Real Madrid por una cantidad de en torno a 30 millones de euros. Su fichaje es similar al de otras apuestas como Rodrygo Goes o Vinicius Júnior, ambos miembros de pleno derecho de la plantilla del primer equipo merengue.
En el Real Madrid son conscientes de que acaban de incorporar a un jugador que es un proyecto de futuro y que todavía debe andar un largo camino para convertirse en la estrella que, a priori, promete ser. Para ello en Concha Espina han trazado un plan de gestión para ayudar a que desarrolle su talento de blanco.
Esta fórmula no entraría en juego hasta el próximo mes, ya que Reinier se encuentra con la selección de Brasil sub23 disputando el Torneo Preolímpico Sudamericano. El jugador podría permanecer concentrado con la Canarinha hasta el 9 de febrero, día en que se disputa la final en Colombia. Todo dependerá del bagaje del equipo nacional.
Primera parada: el Castilla
A partir de esa fecha, Reinier volará a Madrid para incorporarse a la plantilla del Castilla. Es decir, el brasileño no es un fichaje para el primer equipo; al menos de momento. El Real Madrid quiere que el mediapunta de 18 años se forme en las categorías inferiores con el objetivo de adaptarse, de forma muy progresiva, al fútbol español.
Las diferencias entre España y Brasil son notorias, y Reinier llegará muy joven a un país totalmente nuevo para él. Por ello, Raúl González se encargará de dirigir los primeros pasos del jugador en el Real Madrid. El ahora técnico del Castilla le inculcará la filosofía del club en su condición de la leyenda que fue como futbolista merengue.
Una categoría tan dura como es la Segunda División B le vendrá bien al brasileño para comenzar a curtirse en el Real Madrid. En el Castilla será la estrella del equipo y tendrá confianza total para desarrollar su fútbol.
Debut y paciencia
Llegará un momento en el que Reinier debutará con el primer equipo cuando esté física y mentalmente preparado. Zidane y el club le arroparán para alejarle de los focos y restarle presión, de la misma forma que se ha hecho esta temporada con jóvenes talentos como Vinicius y Rodrygo.
Antes de ello será normal ver como el futbolista completa algunos entrenamientos con la plantilla del primer equipo en Valdebebas. Zidane será el encargado de marcar los tiempos en este aspecto, como ya hizo durante el inicio de la temporada con Goes. Será habitual verle alternar entre el filial y los mayores para medir su adaptación progresiva al cambio.
Sin embargo, Reinier no puede ser comparado, a priori, con él, ya que la progresión de Rodrygo rompió todos los pronósticos por su vertiginosa adaptación.
Hay jugadores que explotan antes, como en el caso del '27' blanco, y otros de forma más tardía. Odegaard es un gran ejemplo de cocción lenta que finalmente está dando sus resultados.
Continuidad en casa o cesión
Una vez supere la segunda etapa el Real Madrid valorará que hacer con él: continuidad en el primer equipo o cesión a un club donde pueda seguir creciendo. Cuando este más maduro para la élite, en Concha Espina se seguirá la fórmula de los Varane, Rodrygo y Vinicius, con minutos de blanco; o la de los Casemiro, Achraf, Carvajal, Fede Valverde u Odegaard, que tuvieron que emigrar para ganarse un sitio en Chamartín.
La fecha clave para decidir sobre su futuro será el próximo verano, cuando realice la pretemporada con el primer equipo. Algo habitual en los grandes talentos de las categorías inferiores blancas. El pasado año Zidane ya se llevó a jugadores como Kubo y Rodrygo como dos jugadores más.
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