Situación crítica para el fútbol europeo y nacional. El propio presidente de la UEFA confirmó este sábado su preocupación: "Nada volverá a ser como antes. En este momento tan dramático, la salud es lo más importante". Ceferin, eso sí, afirmó que se trabaja sobre tres escenarios para que la competición regrese antes del 30 de junio.

¿Por qué antes de esa fecha? Porque, según palabras del máximo mandatario europeo, la temporada se daría por finiquitada si cuando comience julio no ha vuelto el fútbol. El primer plan de la UEFA contempla el regreso del fútbol a mediados de mayo. El segundo, a mediados de junio. Y por último, el más pesimista pero que lograría también salvar a los clubes, a finales del mes de junio. 

La UEFA está comprometida a ayudar a las ligas nacionales y los clubes, por ello la próxima campaña no vería con malos ojos que la Champions y la Europa League compartieran jornadas con los campeonatos nacionales. Todo porque el calendario sufrirá una importante saturación teniendo en cuenta que la Eurocopa comenzará el 11 de junio 2021 tras haber sido aplazada un año. 

Lo cierto es que el fútbol europeo se juega unos "7.000 millones de euros" las próximas semanas. Así lo afirmó Jaume Roures, responsable de Mediapro, esta semana y añadió que los equipos corren el riesgo de perder "el 30% de los ingresos".

Una crisis económica que ya ha llevado a grandes clubes como FC Barcelona o Atlético de Madrid a plantear un ERTE y que sería aún mucho mayor si la temporada 2019/2020 no terminar. Por tanto, la prioridad de LaLiga y de los equipos es la de acabar la campaña en cuanto se pueda. 

Partidos sin público

Lo que parece cada vez más difícil es que los partidos de fútbol vuelvan a tener aficionados en las gradas durante el presente curso. De hecho, según afirman diversos dirigentes, se da por imposible y se centran en poder, al menos, acabar las competiciones a puerta cerrada aunque sea ya durante el verano.

Incluso así no será fácil, ya que una vez se levante el confinamiento, sea cuando sea, los equipos tendrán que someterse a una minipretemporada de dos semanas para recuperar el tono físico y evitar lesiones graves. Además, aunque algunas medidas puedan suprimirse durante el mes de abril o mayo, pasará tiempo hasta que se permitan aglomeraciones y eventos multitudinarios. 

El hecho de que los campeonatos se vayan, no que se inicien sino que terminen, más allá del 30 de junio provoca un problema con los futbolistas que están cedidos y que con los que quedan libres en esa fecha. Un asunto para el que el propio Ceferin ha admitido no tener "jurisdicción en los contratos ni en el mercado de transferencias". 

La crisis por el coronavirus dejará importantes secuelas económicas en toda la sociedad para los próximos años y el fútbol también se verá afectado. Aún se desconoce cómo y en qué medida, pero la UEFA, las ligas nacionales y los equipos se preparan para un escenario completamente impensable hace tanto solo unas semanas. Ceferin ya lo advierte: "Nada volverá a ser como antes".