El campeón de Liga se ha ganado un merecido respiro. Será de unos pocos días. Lo justo antes de empezar a preparar con todo el partido contra el Manchester City del próximo 7 de agosto. El Real Madrid, con su 34º campeonato doméstico en las vitrinas, ya solo tiene ojos para el regreso de la Champions y nadie, absolutamente, nadie se atreve a tirar la toalla antes de tiempo.
Saben que no será fácil. El Madrid está obligado a remontar en el Etihad Stadium el 1-2 en contra que encajó en la ida del Santiago Bernabéu. Dentro de poco más de dos semanas, los de Zinedine Zidane tendrán la oportunidad de poner el broche a una temporada que, pase lo que pase en Mánchester, es de sobresaliente. Por eso se permiten soñar y con la dinámica actual hay pocos equipos que les puedan parar.
Muchos piensan que estas dos semanas de inactividad en cuanto a competición le pueden pesar al Real Madrid. Para Zidane es más tiempo para preparar un partido en el que no se podrán cometer fallos y todo estará muy justo. La Champions le 'pone' al Madrid y ni la motivación ni el físico faltarán en la cita.
Si el Madrid recibía este domingo el pasillo en Butarque por ser campeón de Liga, un día antes el Manchester City recibía un mazazo que hacía saltar las alarmas. El Arsenal se lo cargó de la FA Cup en semifinales y no de cualquier manera, puesto que los gunners pasaron por encima de los citizens (2-0). Mikel Arteta, pupilo de Guardiola en el City y ahora primer entrenador, ganó la batalla al maestro Pep jugándole con sus armas.
El Arsenal mostró al Madrid que este City es vulnerable. Desde el regreso del fútbol en Inglaterra ha sumado tres derrotas y cuenta por victorias el resto de partidos, siete. El resultado de este sábado en Wembley le bastaría al Real Madrid para remontar la eliminatoria y obtener el billete a los cuartos de final. La misión empieza a no ser tan imposible.
Las claves de Zidane
Aunque elegir el once titular no será sencillo para Zidane. Deberá acertar con todos sus jugadores y contra el Leganés ya se vio como el técnico francés quiso dar carpetazo a La Liga pensando en la Champions. Se vio con la ausencia de Eden Hazard, a quien quiere ya con la cabeza en la vuelta contra el City. El belga, que ha ido y viniendo del equipo desde el regreso del parón, puede ser el factor diferencial del partido y Zidane desea poder contar con él en plena forma. En dos semanas hay tiempo para su puesta a punto.
Por lo que pueda pasar con Hazard, Zidane tiene varias alternativas de garantías y una de ellas es Marco Asensio. Ante el Leganés demostró, si es que todavía había alguna duda, que está en un gran estado de forma. Tres goles en un puñado de minutos (lo máximo que jugó fueron 69' ante el Alavés) lo acreditan. Solo siete compañeros llevan más goles que él esta temporada. Dato abrumador.
Aunque lo que seguro estará en la cabeza de Zidane más que otra cosa estos días será la baja de Sergio Ramos para Mánchester. Sin él es más difícil. Ramos, que ha marcado la friolera de seis goles tras el parón, es el eje del equipo y su garra y espíritu hubiera sido fundamental sobre el campo ante los de Guardiola. Sin su capitán, el Madrid deberá demostrar que tiene más corazón que solo el del camero y volver a impresionar al mundo. Si eliminan al City, ya saben que pasarán a ser favoritos a La Orejona. Europa tiembla.