El Real Madrid de baloncesto ya tiene nueva camiseta para la temporada 2020/2021. El color blanco seguirá copando la primera equipación del conjunto de Pablo Laso en este nuevo año e imitará la misma fórmula de tonalidades que tiene la del equipo de fútbol. La plantilla vestirá una casaca con los bordes del cuello y las líneas laterales con motivos rosa chicle.

El Madrid repite los colores de la temporada 2014/2015 en la que el rosa apareció por primera vez en su elástica. En aquella ocasión compartía protagonismo con el negro como color secundario. Otros detalles de la camiseta como la marca de Adidas en el pecho, por debajo del escudo y la serigrafía del patrocinador Paladium Hotels, que irá en color azul oscuro como la pasada campaña.

Los jugadores blancos lucirán esta camiseta por primera vez en la Supercopa Endesa. Después, la Liga Endesa y la Eurocopa comenzarán a coger protagonismo donde tanto el resto de España como Europa irán viendo cómo la plantilla defenderá los intereses del club con esta equipación. Aún se desconoce cómo será la serigrafía de los nombres y los dorsales.

Aún se desconoce cómo será la segunda camiseta, pero todo apunta a que también se imite la equipación del equipo de fútbol y sea completamente rosa, con los detalles, desde la marca y las rayas de Adidas hasta la publicidad y los dorsales, en color azul oscuro. El escudo luciría también monocromático en esa misma tonalidad.

Quién la vestirá

Ha sido un verano relativamente tranquilo en el entorno del Real Madrid, más pendiente de las salidas que de las llegadas. El retorno del cedido Carlos Alocén y el fichaje estelar de Alberto Abalde han sido las notas más destacadas, a pesar de que finalmente no pudo llegar guinda de Ante Zizic. Sin embargo, el asunto Campazzo, que sigue en pausa, ha sido la operación que mayores desvelos ha traído a los dirigentes blancos. El argentino, de momento sigue en plantilla a la espera de llegar a un acuerdo para su salida a la NBA, por lo que podrá defender su galardón de MVP obtenido el pasado año. 

Por su parte, la entidad madridista consiguió retener a Nico Laprovittola ante la incertidumbre de Campazzo y consumó salidas como las de Jordan Mickey, Salah Mejri, Mario Nakic y el cedido Klemen Prepelic, que pasó de Joventut a Valencia Basket. Sin grandes cambios, Laso ha conseguido mantener al núcleo duro de una plantilla sobradamente ganadora que tiene ante sí el reto de volver a triunfar tras la debacle sufrida en liga el año pasado.

Los blancos han 'malacostumbrado' a ganar títulos todos los años a su hinchada, y a pesar de que el curso pasado hicieron doblete, la eliminación a las primeras de cambio en la fase final excepcional de Valencia dejó algunas dudas. Ahí tendrán que aparecer los Sergio Llull, Edy Tavares, Gabriel Deck, Anthony Randolph, Trey Thompkins, Rudy Fernández, Jaycee Carroll, Jeff Taylor, Felipe Reyes, Usman Garuba y Fabien Causeur para demostrar que el Real Madrid sigue siendo un equipo ganador. La confianza en Pablo Laso es plena y, una vez el coronavirus ha quedado a un lado, los merengues quieren volver a campeonar.

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