El Real Madrid sabía que se la jugaba en Milán. Una derrota contra el Inter le hubiera dejado en una situación muy tocada en la fase de grupos de la Champions League y, aunque el empate no fuera un mal resultado, el equipo salió a ganar. Dio igual que Zinedine Zidane no contara con su columna vertebral (Sergio Ramos, Casemiro y Benzema) por culpa de las bajas. Se vio al mejor Madrid gracias a las reivindicaciones.

El de San Siro fue uno de esos partidos en los que aquellos futbolistas que fueron campeones y lo ganaron todo sacan las garras para demostrar que todavía están 'vivos'. Cuando más dudas habías, tras pinchar contra Valencia y Villarreal, y más inseguro se sentía el madridismo, con las ausencias importantes, el Real Madrid dio un puñetazo sobre la mesa aupado por jugadores que, por decirlo de forma amable, están en la cuerda floja.

En Milán fueron protagonistas tres jugadores cuyo futuro está en el aire. Ya sea porque sus contratos se acercan a su final o porque están en la lista de futbolistas que pueden haber cumplido un ciclo. Incluso ambas. El que mejor les conoce es Zidane, que siempre ha defendido a su grupo y seguramente sea el que nunca ha perdido la fe en ellos. Ayer le devolvieron la confianza.

Luka Modric cae al suelo tras la entrada de Gagliardini REUTERS

Modric

Luka Modric lleva desde el comienzo de la temporada llenándose de argumentos para merecer la renovación. Su contrato termina en juno de 2021 y él ha dicho por activa y por pasiva que solo piensa en seguir en el Real Madrid y retirarse algún día de blanco. El problema es la edad, que ya tiene 35 años, pero él ha insistido también en que quiere que se le mida por lo que hace en el campo y no por su DNI.

Y lo que hace en el campo siguen siendo cosas de magia. Además, está a un gran nivel físico y parece que se cumple lo que él mismo dijo en el último parón: juega mejor cuanto menos le dosifiquen. Lleva cuatro partidos seguidos (dos con Croacia y dos con el Madrid) jugando los 90 minutos y se ha visto lo mejor de él.

Lucas Vázquez corta la jugada de Skriniar Reuters

Lucas Vázquez

Machacado por la crítica, Lucas Vázquez ha sido en el Madrid ese jugador que todo entrenador quiere tener en su banquillo. No será una estrella mundial, pero su valor está en la entrega y el sacrificio que demuestra temporada tras temporada. Se haya sido injusto o no con él, la realidad es que también acaba contrato el verano que viene y de él apenas se ha hablado.

Zidane defendió su continuidad y la del siguiente protagonista en rueda de prensa: "Merecen quedarse aquí". Es un mensaje claro sobre la renovación de Lucas del técnico francés, que encontró en él la mejor solución a las bajas en el lateral derecho y sigue confiando en el canterano en momentos de dificultad. En San Siro volvió loca a la defensa neroazzurra.

Nacho Fernández, con la camiseta negra del Real Madrid

Nacho Fernández

Por último, otro canterano y la otra persona de la que Zidane dijo que merecía seguir: Nacho Fernández. Él no termina contrato el verano que viene (acaba en 2022), pero ha estado igual o más fuera todavía que sus compañeros. Y es que tras verse como cuarto central, Nacho pidió salir hace unos meses para poner rumbo a la Serie A. Tenía ofertas y todo estaba listo, como reveló su agente, pero la lesión de Carvajal frenó todo.

Nacho ha tenido momentos malos y haber tenido que ser comodín en el lateral en algunas ocasiones no le ha ayudado en los últimos años. En San Siro demostró que es un central muy serio y junto a Varane (que también se reivindicó con otro partidazo) se vio la misma fortaleza que hay cuando juega Sergio Ramos. Por méritos propios, ha adelantado a Militao y vuelve a ser el tercer central del equipo.