Primera 'final' para el Real Madrid de Zidane y victoria para los blancos en la siempre complicada plaza del Sánchez Pizjuán. Vinicius se convirtió en la clave del partido con sus apariciones eléctricas y fue gracias a una de ellas por la que el vigente campeón consiguió el único gol del encuentro, después de que Bono la introdujese en su propia portería. [Narración y estadísticas: Sevilla 0-1 Real Madrid]
Hablar de un Sevilla - Real Madrid es hacerlo de uno de los grandes partidos que se pueden disfrutar en la liga española. Por detrás de El Clásico o el derbi, el duelo ante el conjunto hispalense está alcanzando un nivel superior de competitividad, lucha y pelea.
Este, además, siempre es un encuentro especial para Sergio Ramos. Pero, en esta ocasión, el central de Camas no estuvo en el Sánchez Pizjuán, ya que continúa recuperándose de su lesión y se espera que pueda estar al fin disponible para el enfrentamiento ante el Borussia Mönchengladbach del próximo miércoles.
Sin el capitán y sin Asensio u Odegaard. Ambos jugadores se quedaron en el banquillo de inicio. Zidane apostó por el 4-3-3, pero con el centro del campo formado por la vieja guardia y con un tridente en el que Benzema estuvo escudado por los dos jóvenes extremos brasileños.
Lopetegui también hizo varios cambios en su once. El Sevilla llegó al duelo liguero después de la derrota ante el Chelsea, con póker de goles de Giroud. Pero los hispalenses rotaron en la Champions League después de tener ya el pase a octavos asegurado. Ahora, ante el Real Madrid, el técnico vasco apostó por su equipo de gala.
Vinicius, omnipresente
No se había cumplido el primer minuto de partido y Vinicius Júnior ya mostró su carta de presentación en Nervión. Por la derecha y de disparo cruzado, el brasileño puso contra las cuerdas a Bono y a toda la zaga sevillista, que respiraron tranquilos. El '20' blanco, este sábado de negro, fue el jugador más inspirado en esos primeros compases del encuentro.
Pudo volver a marcar el brasileño, en una acción en el área que se convirtió en un auténtico barullo. Benzema la tocó de cabeza ante la oposición rival, por ahí andaba Vinicius con la caña preparada, pero el Sevilla se salvó. Si el ex del Flamengo fue el más importante para los blancos, Bono lo era por el bando local.
Se animó el Real Madrid al ritmo que ponía Vinicius Júnior. La samba del carioca se contagió entre los suyos. Casemiro aprovechó un rechace de una falta botada por Kroos para hacer el primero del partido, pero su disparo fue repelido por un rival. Después fue el propio Toni Kroos el que, desde lejos, se animó y su chut se fue rozando la escuadra de la portería de Bono.
Con el conjunto merengue volcado en ataque, los de Lopetegui intentaron frenar las intentonas blancas, algo consiguieron, pero sin poner en peligro a Courtois. El portero belga actuó como un espectador en el Pizjuán durante los primeros 45 minutos. Mientras que en el otro área, Bono tuvo que emplearse a fondo para desviar el tiro de Benzema desde la frontal y evitar el gol con la punta de los dedos.
El Sevilla despierta
El partido se fue al descanso con una importante baja para el Sevilla. Munir se quedó en los vestuarios del Sánchez Pizjuán después de haber sufrido unas molestias musculares en el descuento de la primera mitad. En su lugar, ingresó en el terreno de juego Óliver Torres.
Tras la reanudación se vio otro partido diferente. El Sevilla comenzó no solo a jugar de tú a tú, sino también a pasearse por las inmediaciones del área de Courtois. Y así llegó la primera parada del belga en el encuentro. Centro de la derecha y Luuk de Jong se lució con una estética chilena. El lanzamiento acrobático salió muy centrado y el guardameta madridista no tuvo problemas para atajar el esférico.
La puntilla de Vini
Cuando al fin pareció que el Sevilla despertaba, apareció Ferland Mendy por banda izquierda para poner un centro tras una gran acción de Benzema. Vinicius se adelantó a los defensas rivales para llegar al balón y que Bono, ante su presencia, acabase fallando y provocando el primero de los blancos.
Antes de cumplirse la hora del partido, se hizo justicia en el Sánchez Pizjuán. El Real Madrid que no pudo ante el Shakhtar Donetsk el pasado martes, puso una marcha más para no volver a pinchar antes de su semana más decisiva de la temporada. El balón entró con Bono siendo el último en tocar el balón, aunque sin la presencia de Vinicius no habría gol.
Lopetegui azuzó a los suyos para rematar el calentamiento y hacer así un carrusel de cambios en busca de la victoria. También movió ficha Zidane. Turno para que Rodrygo abandonase el campo, tal vez el más discreto del tridente, para que Asensio saliese al verde del Pizjuán.
Con el marcador en contra, el equipo local fue con todo a por el empate. Puso en aprietos el Sevilla al Real Madrid en el tramo final del partido, con tres grandes ocasiones para los de Lopetegui. Disparo con rosca de Suso que no fue gol por muy poco. Antes la tuvo Gudelj de falta, con un lanzamiento que por el efecto visual llegó a parecer que el balón se había colado en la portería de Courtois. Ocampos emuló la chilena de De Jong, pero en esta ocasión fue el belga el que firmó una gran parada.
Pero el luminoso no volvió a moverse. Victoria balsámica para un Real Madrid que había dejado muchas dudas desde el parón de selecciones de noviembre. Un triunfo que impulsa a los de Zidane en La Liga y que también da margen al discutido entrenador francés antes de las 'finales' ante el Borussia Mönchengladbach y contra el Atlético.
Sevilla 0-1 Real Madrid
Sevilla: Bono; Jesús Navas, Koundé, Diego Carlos (Idrissi, 80'), Aleix Vidal; Jordán (Gudelj, 64'), Fernando, Rakitic (Suso, 64'); Ocampos, De Jong (En-Nesyri, 64'), Munir (Óliver Torres, 46').
Real Madrid: Courtois; Lucas Vázquez, Varane, Nacho, Mendy; Kroos, Casemiro, Modric; Rodrygo (Asensio, 66'), Benzema, Vinicius.
Goles: 0-1, 55 Bono (p. p.).
Árbitro: José María Sánchez Martínez (Comité Murciano). Amonestó al local Gudelj (76') y a los visitantes Kroos (44'), Modric (60') y Vinicius (89').
Incidencias: Partido de la duodécima jornada de La Liga, disputado a puerta cerrada en el Ramón Sánchez-Pizjuán (Sevilla, España).