El Real Madrid arrancó el año con buen pie tras el triunfo ante el Celta en Valdebebas. Las buenas sensaciones quedaron tramitadas en tres puntos tras un gran partido de los merengues en el que sólo sufrieron en los primeros minutos del partido. Todo este desenlace estuvo íntimamente relacionado con el partido de un Marco Asensio que volvió a confirmar sus mejores presagios con el fin de que los madridistas pueden pensar que realmente puede ser su año.

Si las buenas sensaciones que dejó ante el Granada fueron motivo de halagos de la hinchada merengue, su actuación en el Di Stéfano de este sábado ha sido la de su confirmación. Todo esto llega en un momento en el que Zidane quiere ir "poco a poco" con Hazard, algo que le dará más protagonismo al mallorquín. Ya sea por la izquierda o por la derecha, estos minutos sobre el campo hacen pensar en él como parte esencial de la plantilla de nuevo.

La acción del primer gol en el que le pone el balón a Lucas Vázquez, liderando una contra a la carrera como más destacaba en su mejor etapa, y la de su tanto, en el que, también en un contragolpe, terminaba perforando la portería, volvían a resaltar sus mayores virtudes. Las mismas que le llevaron a marcar en todas las competiciones habidas y por haber con menos de 22 años. Esas que le hacían tener aura de estrella.

Ahora, con 24, a unos días de hacer 25, el balear ha alcanzado un grado de madurez que al principio de la temporada le colocaba entre los titulares habituales día tras día. Después de pasar una especie de bache, en el que los malos resultados le señalaron, ahora se ha sumado a esa racha merengue de la que se pretende aprovechar para volver a asentarse en el once tipo de Zidane. Hay varias cuestiones que hacen pensar que este 2021 será el año de Marco Asensio.

Seis meses de adaptación

La lesión que él tuvo no fue sencilla. Romperse la famosa 'tríada' supone un proceso en el que prácticamente tienes que aprender a andar. Un futbolista como él que depende tanto de su potencia, su desborde y su disparo, necesitaba este tiempo prudencial para recuperar sensaciones pasadas. La mochila le pesaba mucho al principio de la campaña porque tiene la responsabilidad de ser uno de los líderes del ataque merengue. Esta confianza debería de darle un extra para salir del paso.

Segunda oportunidad

Quizá todo esto algo tenga que ver también con el entrenador. Zidane no dejó de creer en él a pesar de que había tenido una continuidad durante el mes de octubre en la que no fue demasiado protagonista. Sabe que es su hombre para la banda derecha en los grandes partidos, cuando Hazard esté en buena forma de nuevo, y el francés está haciendo todo lo posible para recuperarlo. El partido de hoy es un tanto de crédito que acumulará.

Año de Eurocopa

Luis Enrique también le tiene mucha fe, cuestión para que el mallorquín no haya dejado de pensar que puede ganarse un sitio en el ataque de 'La Roja' durante este tiempo. Aunque todo parecía muy cerrado durante la Nations League, la parte ofensiva del equipo del asturiano sigue abierta y espera con los brazos abiertos al jugador del Real Madrid. La Eurocopa es su primer gran torneo en el que tendrá que ser líder natural de España.

Antes de fichar...

La paciencia con Asensio también se entiende gracias a las circunstancias económicas por las que pasa el Real Madrid. Está llamado a ser líder entre otras cosas porque es una apuesta que hizo el equipo hace años y, antes de que lleguen posibles Mbappé o Haaland, no verá su lugar en el once comprometido. Si quiere exprimir su legado de blanco, sabe que este momento es trascendental para perpetuar su lugar en el club. Además, los jóvenes Vinicius y Rodrygo vienen pisando fuerte por detrás.

Aliado para Zidane

Tal y como está la temporada, el equipo necesita su gol. La confianza de Zidane en Asensio radica sobre todo en la falta urgente de tantos que tiene el ataque. La plantilla cosechó en 2020 el dato más bajo de goles de los últimos años, y sin ese gol es imposible salir adelante, sobre todo en Champions. El mallorquín es parte esencial dentro de las cifras que espera el cuerpo técnico y empieza 2021 marcando y asistiendo.

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