La ley de la gravedad universal dice que "la fuerza con que se atraen dos cuerpos tenía que ser proporcional al producto de sus masas dividido por la distancia entre ellos al cuadrado". El Atalanta no hace caso a ninguna norma, aunque Gian Piero Gasperini tiene un libreto curioso. Este equipo está diseñado para no atender a lo tradicional, a lo ya escrito, a lo que otros han demostrado; el fútbol está en constante evolución y este combinado es un ejemplo de ello.
El Real Madrid tiene un reto mayúsculo delante, aunque seguramente fuera de los equipos más factibles entre los que tenía en el bombo de rivales de los octavos de final de la Champions League. Pero las circunstancias en las que llega a este encuentro han complicado la eliminatoria de forma notoria. La gran cantidad de bajas que ha plagado de canteranos el banquillo merengue y ha dejado sin muchas alternativas para el once titular a Zinedine Zidane ha igualado la contienda.
Aunque los italianos tampoco podrán contar con Hans Hateboer en esta primera velada también por lesión, y ya sin 'Papu' Gómez en la plantilla, Gasperini tiene todas sus armas disponibles. Aunque el llamado 'tridente del tinte de pelo' ya no está, en este equipo lo más importante es que todo el equipo conoce y aplica a la perfección su plan de partido. Las individualidades, aunque pueden marcar la diferencia cuando se habla de la potencia de Zapata o Muriel, quedan en un plano secundario.
Hay una cosa que hacen muy bien: presionar. Los bergamascos van jugador a jugador por todo el campo, con el salvoconducto para los laterales y los centrales abiertos de la defensa de tres, que lo hacen con más distancia. A todo campo, es a todo campo. La intensidad de esta búsqueda de la recuperación del balón lo más temprano posible es una seña de identidad, pero también la razón por la que los partidos de la Atalanta acaban con tantos goles, tanto a favor como en contra.
Y es que, aunque las correcciones son más fáciles con esa variante de los laterales, los espacios son más comunes. Ahí jugadores como Vinicius o Marco Asensio deberían de vivir cómodos, así como los pasadores tan certeros como Kroos y Modric encontrar esos lugares donde estos jugadores destaquen. Más que nunca hará falta esa precisión, tanto en la salida del balón como en la puesta en largo del ataque de Zidane. La capacidad goleadora de Zapata e Ilicic amenaza ante la recuperación en campo contrario.
Todo a la banda
Si tienen que salir desde atrás, la mayoría de las veces lo harán desde la izquierda. Robin Gosens e Ilicic serán los baluartes para que el balón llegue a campo contrario lo más limpio posible, aunque el central de ese lado y los centrocampistas, Freuler y De Roon habitualmente, también cargan esta zona para generar superioridades. En esta banda espera un Lucas Vázquez que, aunque ha generado automatismos defensivos este año, necesitará del trabajo de Vini, Modric y Casemiro para no quedarse solo.
Sobre todo porque arriba espera un hombre que aprovecha cualquier espacio muy bien como Zapata. Nacho y Varane tendrán un duelo de mucho peso. Pero estos dos son muy superiores a la línea de tres de la Atalanta. Toloi, Djimsiti y Palomino no son jugadores de gran nivel. Romero ha dado más a esa línea con una gran capacidad de anticipación. En el momento en el que no defienden de cara, se les ven las carencias. Ese debe ser el objetivo de los blancos. Aunque no está Benzema o Hazard, los jugadores que deberían de marcar la diferencia en esta zona del campo, es un buen día para que Asensio y Vini marquen diferencias, así como Mariano puede encontrar buenas situaciones para hacer lo que mejor sabe: marcar goles.
El Atalanta lo fía todo al plan A y este tiene algunas lagunas. No hay gran desborde en estos jugadores, es más una cuestión de posicionamiento y superioridades. Un Real Madrid concentrado y sin errores de bulto no debería de ser penalizado por este sistema. Los blancos no deberán de desquiciarse con las faltas, ya que es el plan B cuando la presión no surte efecto. Pero los blancos tendrán que generar, algo que les ha costado mucho durante todo el año. Es un equipo proclive a que el rival tenga ocasiones, pero los de Zidane tendrán que mejorar en esta parcela. Volver a Valdebebas con un buen resultado y varios goles a favor es obligatorio ante la capacidad goleadora de este equipo. Es uno de los conjuntos en Europa que más goles hace y esto no es casualidad.
[Más información: "Jugar contra el Real Madrid es como ir a la universidad, siempre hay que aprender"]