El Real Madrid no falló. El equipo de Zidane se vistió con el traje de las grandes noches europeas y no dio ninguna opción a un Atalanta que solo preocupó con su tirón inicial. Entre Modric y Benzema fabricaron el gol de la tranquilidad y Sergio Ramos sentenció con un claro penalti cometido sobre un Vinicius que realizó un gran encuentro. [Narración y estadísticas: Real Madrid 3-1 Atalanta]
Con todo el pescado vendido, Muriel convirtió una falta y Asensio puso la puntilla nada más salir al campo. No hubo lugar al susto en el Di Stéfano y el Real Madrid tuvo un plácido final de partido con el marcador completamente controlado tras haberse impuesto también en Italia.
Zidane triunfó con su esquema de tres centrales y con su apuesta por un Vinicius en ataque que forzó una pena máxima y que a punto estuvo de marcar el gol de la Champions con una brutal arrancada desde campo propio. Eso sí, la calma llegó con la vieja guardia. Pase de Modric y gol de Benzema. Da igual cuando lea esto, sigue sucediendo así desde hace años.
El equipo madrileño secó además a un Atalanta acostumbrando a marcar varios goles por encuentro. Ese juego alegre del conjunto de Bérgamo chocó con un muro llamado Real Madrid que solo concedió un gol, y de falta, durante los 180 minutos que duró la eliminatoria.
Con solidez defensiva y con un gran despliegue físico del centro del campo formado por Kroos, Modric y Valverde, el Real Madrid consiguió frenar la valentía del Atalanta y estar en el bombo de cuartos en el sorteo del próximo viernes. Ya solo quedan ocho en la Champions.
El ímpetu inicial del Atalanta incomodó a un Real Madrid que comenzó sufriendo en exceso. El conjunto italiano imposibilitaba que los de Zidane controlaran el partido como en la ida y esa locura hacía crecer las opciones de los de Bérgamo, aunque tampoco terminaban por poner en aprietos a Courtois.
El esquema de tres centrales del Real Madrid dio toda la banda izquierda a un Mendy algo anárquico y que tan pronto aparecía por dentro como por la derecha. La punta de ataque fue para Vinicius y Benzema que fabricaron la primera gran ocasión del partido. Un gran pase del francés dejó al brasileño en una posición franca, y dentro del área, para batir a Sportiello, pero Vinicius se lió y terminó estrellando la pelota en la zaga nerazzurri.
La vieja guardia
Con el paso de los minutos el Atalanta ya no asfixiaba tanto, pero lo que no imaginaba Gasperini es que el Real Madrid acabaría sacando fruto de una presión más típica del equipo italiano. Sportiello erró un pase con los blancos encima y Modric cedió a Benzema para que hiciera el 1-0 en el minuto 34. Fue el gol de la tranquilidad y el que provocaba en aquel momento que los de Zidane pusieran pie y medio en los cuartos de final.
Gasperini puso todo sobre el campo al meter a Zapata por Pasalic en el descanso y juntarlo con su compatriota Muriel. El Atalanta pasó a jugar con dos puntas y eso creó más problemas para el Real Madrid, que, sin embargo, gozó de una gran ocasión en los pies de Vinicius. El brasileño roba en campo propio y hace una jugada maradoniana, pero cruzó demasiado y el balón salió lamiendo el poste.
La marcha de Vinicius
El Real Madrid jugaba al ritmo de Vinicius y de esta forma consiguió cerrar la eliminatoria. El '20' volvió a meter una marcha atrás y Toloi cayó en la trampa de derribarle provocando un claro penalti. Sergio Ramos marcó la pena máxima para poner el 2-0 y pedirle diez minutos más a Zidane mientras Militao se desabrochaba ya el chándal.
Con la eliminatoria decidida, el Real Madrid se puso como objetivo mantener la portería a cero. Courtois, con dos grandes paradas, evitó los goles de Zapata y Benzema respondió también tuvo una clara oportunidad con un cabezazo al palo. No había nada en juego más que la honra, pero los de Gasperini no se rindieron nunca para al menos intentar maquillar el resultado.
Lo consiguieron con un golazo de falta de Muriel, pero la alegría duró poco en el Atalanta. Asensio, que terminaba de saltar al campo, puso el definitivo 3-1 y selló así la victoria de un Real Madrid muy sólido. El sistema con tres centrales empieza a llamar con fuerza a Zidane tal y como hizo con Del Bosque en el 2000. En aquella edición un equipo blanco dubitativo en Liga se convirtió en una roca en la Champions con este esquema. Fue el año de La Octava y este Real Madrid puede seguir el mismo camino para ver si encuentra el final de aquella ocasión.
Real Madrid 3-1 Atalanta
Real Madrid: Courtois; Lucas Vázquez, Nacho, Varane, Sergio Ramos (Militao, 64'), Mendy; Fede Valverde (Marco Asensio, 82'), Kroos, Modric; Vinicius (Rodrygo, 69') y Benzema.
Atalanta: Sportiello; Tolói (Palomino, 61'), Romero, Djimsiti; Mahle, De Roon, Pessina (Caldara, 84'), Gosens (Ilicic, 57'); Pasalic (Zapata, 46'), Malinovski y Muriel (Miranchuk, 84').
Goles: 1-0, 34' Benzema; 2-0, 60' Sergio Ramos (p.); 2-1, 83' Muriel; 3-1, 84' Marco Asensio.
Árbitro: Danny Makkelie (Países Bajos). Amonestó a Fede Valverde (39'), Nacho (73') y Kroos (76') por el Real Madrid; y a Toloi (59') por el Atalanta.
Incidencias: encuentro de vuelta de octavos de final de la Champions League, disputado en el estadio Alfredo Di Stéfano (Madrid, España) a puerta cerrada.