El Real Madrid ha dado un golpe en la mesa este sábado tras llevarse El Clásico de La Liga frente al FC Barcelona por 2-1. Los jugadores del equipo blanco se creyeron por encima de su rival desde el primer segundo y así lo demostraron en una primera parte para el recuerdo.
Los ataques a la espalda de la defensa del equipo de Ronald Koeman fueron constante. Era un orgullo y un disfrute para los sentidos ver a Vinicius en libertad correr con muchos metros hasta la portería de Ter Stegen. Fede Valverde rompía líneas con sus conducciones y Lucas Vázquez fue un puñal por banda derecha hasta que se lesionó.
Fue precisamente ahí cuando el equipo se desarmó un poco y cayó, pero el daño ya estaba hecho. Para ese momento, los blancos ya ganaban por 2-0 y ya se sabía ganadores de El Clásico, aunque sufrieron. Hubo que sufrir porque el Barça es un equipo que tiene calidad y pegada arriba y, aunque no exhibieron fútbol, si lo intentaron mediante la acumulación de hombres arriba.
Para prueba, el partido de Leo Messi, que no estuvo, no se le vio, no apareció y aún así pudo meter un gol antológico con un lanzamiento de córner que se estrelló directamente en la escuadra de la portería de Courtios. Solo Mingueza fue capaz de batir al espigado meta blanco con una acción de más fortuna que calidad, ya que su disparo con la espinilla salió envenenado y venció al meta belga.
Sin embargo, por aquel entonces, el electrónico del partido ya había sido inaugurado y estrenado por dos jugadores del Real Madrid. Karim Benzema había adelantado al conjunto blanco y Toni Kroos, también con suerte, había duplicado la diferencia y había puesto tranquilidad en el bando de los de Zinedine Zidane.
Pudieron ser más, ya que Fede Valverde tuvo una ocasión clarísima que estrelló en el poste y Lucas Vázquez, en el rechace de esa misma acción, estuvo a punto de batir también a Marc-Andre Ter Stegen, pero el meta alemán se rehizo muy bien y en una acción felina detuvo el lanzamiento del lateral. Podía haber sido la sentencia definitiva, aunque el Barça estaba ya herido de muerte y se fue desangrando en un segundo tiempo en el que tampoco mostró ni brillo ni pegada, pero sí muchas protestas, algo que viene siendo habitual en el equipo de Ronald Koeman.
El calvario de RAC1
La derrota en El Clásico era ya todo un hecho y se veía, no solo en el ambiente, sino también en el entorno culé. Desde RAC1 no podían evitar lamentarse por el vendaval que había sido el Real Madrid en una primera mitad en la que obtuvo una ventaja que ya fue insalvable. "Golazo de Benzema, el remate es precioso, es de crack", afirmaban.
El segundo tanto de Toni Kroos fue un jarro de agua fría que arruinó las pocas esperanzas que todavía les quedaban. Además, se fijaban en la cara de Koeman, que ya un claro reflejo de la dolorosa derrota. Solo el gol de Mingueza avivó un poco los ánimos, pero todos sabían que era ya un poco tarde. También fue protagonista una de las últimas jugadas del partido, el 'piscinazo' de Braithwaite en una acción en la que los jugadores del Barça pidieron penalti de Mendy. En un primer momento pidieron penalti claro y hasta hablaron de vergüenza. Sin embargo, tras ver la repetición, todos los presentes en RAC1 tuvieron que admitir que, efectivamente, no había sido nada y que no debía entrar el VAR. Un baño de realidad en una noche de diluvio para el recuerdo.
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