El Real Madrid ya tiene preparada su segunda salida del mercado de fichajes. Después de que Sergio Ramos acabara su contrato y no renovara, el siguiente en irse es Brahim Díaz. El futbolista malagueño ya ha cogido las maletas y ha puesto rumbo a Italia para hacer oficial este fin de semana su regreso al Milan. Será a través de una cesión por dos años y sin opción de compra como querían el futbolista y la entidad merengue.
La de Brahim, además, es la primera salida que cierra el Real Madrid en su ataque. Florentino Pérez ya dijo que el objetivo es contar con una plantilla de 25 futbolistas para la temporada que viene y es en la parcela ofensiva donde más trabajo hay que hacer en la 'operación salida'. Brahim es solo el primero y durante las próximas semanas le irán siguiendo más.
Para ir ordenando los cromos, hay que especificar que el Real Madrid cuenta -ya sin Brahim- con hasta once futbolistas de perfil ofensivo. No entra Lucas Vázquez, que desde la temporada pasada ya actúa como lateral derecho aunque en la página del club siga apareciendo entre los atacantes. También cuentan los dos mediocentros ofensivos que tiene Carlo Ancelotti ahora mismo: Isco Alarcón y Martin Odegaard.
De los once, al menos, tiene que haber cuatro salidas. ¿Quiénes son los que seguirán seguro? Karim Benzema, Vinicius, Rodrygo Goes, Odegaard, Marco Asensio y, aunque haya habido debate al respecto, Eden Hazard. Hay seis fijos, salvo sorpresa, por lo que son el resto los que están en 'peligro' de seguir los pasos de Brahim.
Isco se lo curra
Hay que ver la situación de cada uno, sujeta a cambios, como ya los está habiendo desde que empezara la pretemporada. Es el caso de Isco, una salida que se daba por segura, aunque tenía su complejidad por su ficha que no está al alcance de muchos equipos. Sin embargo, hay sorpresa entre 'Carletto' y el club por la forma en la que se ha incorporado al trabajo y su continuidad, si puede ser de utilidad para el entrenador, es menos dolorosa. Termina contrato en 2022, por lo que su adiós se podría posponer.
Bale, un problema
La continuidad de Isco, sin duda, obligaría a buscar más soluciones. Especialmente en el caso de Gareth Bale. También con contrato hasta 2022 y también con un salario que dificulta la salida que tanto desea el Real Madrid. Ancelotti podría recuperarlo y mantenerlo un año, como parece que es la intención del jugador, pero hay un factor que crea problemas: en principio, será extracomunitario. En el equipo blanco ya están los tres cupos ocupados (Vinicius, Rodrygo y Militao) y con Bale habría que sacudir la baraja.
Kubo, Jovic y Mariano
Luego está, probablemente, el adiós más seguro que es Take Kubo, que se irá cedido y por el que ha preguntado ya la Real Sociedad. Por último, están los dos suplentes de Benzema: Luka Jovic y Mariano Díaz. El Madrid no cuenta con ellos y quiere venderlos, pero hay que ver las ofertas que llegan y si los jugadores ponen de su parte para irse.
El Madrid tendría los deberes hechos si cierra varias de esas salidas. Luego tocaría redondear la 'obra' con un fichaje estelar, el de Kylian Mbappé. El club blanco no renuncia a él y si se pone a tiro le fichará para que así sea el delantero que complete el ataque para la próxima temporada.
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