El Real Madrid acumula tres test de pretemporada y aunque todavía no conoce la derrota, tan solo ha ganado uno de los encuentros. Aún queda un duelo por celebrarse para los blancos antes del inicio de La Liga, será frente al Milan italiano el próximo domingo 8 de agosto.

Uno de los jugadores destacados en este inicio de la pretemporada ha sido un Andriy Lunin que ante la ausencia de Thibaut Courtois, quien disputó la pasada Eurocopa con la selección de Bélgica y tenía permiso para incorporarse más tarde al trabajo, ha sido titular bajo los tres palos.

Precisamente, muy comentada ha sido la actuación del portero ucraniano durante el partido ante el Rangers. Durante los primeros 45 minutos, el conjunto escocés logró firmar cinco tiros a portería y cada uno de ellos fue sacado de una manera notable por el Guante de Oro del Mundial sub20 de 2019.

El Real Madrid fichó a Lunin con vistas, sobre todo al futuro. Después de una cesión, el ucraniano formó parte de la primera plantilla en la temporada 2020/2021. Pero no tuvo suerte. Zidane tan solo le dio la alternativa en un encuentro, en la Copa del Rey, y como los blancos cayeron, no volvió a jugar.

Un duro golpe para el joven portero. Pero lejos de mirar fuera del Santiago Bernabéu, Lunin cree en su potencial y en que puede acabar siendo importante. Y eso que por delante en la rotación tiene a Courtois, uno de los mejores en su posición en la actualidad del planeta fútbol.

Confianza de Ancelotti

Thibaut Courtois será el portero titular del Real Madrid en las noches de gala. O eso es lo que se espera si no hay ningún contratiempo. Pero Carlo Ancelotti ya ha demostrado en su anterior etapa en la casa blanca que no le tiembla el pulso al rotar en la portería, algo que ya hizo cuando a sus órdenes tenía a Iker Casillas y Diego López.

El técnico italiano entonces defendió esta solución para la portería merengue al asegurar que era una manera de mantener a los dos cancerberos con confianza y enchufados. No se sabe todavía cuál es su plan para Courtois y Lunin, pero lo que es seguro es que el ucraniano le ha causado una gran impresión durante la pretemporada.

Lunin, ilusionado

El ucraniano es consciente de su situación, pero no quiere ser testigo de excepción en el banquillo de los partidos del Real Madrid como le pasó con Zidane. De hecho, el pasado mes de mayo ya afirmó cuál era su objetivo: jugar muchos partidos con la camiseta blanca.

"Cuando me toque jugar yo intentaré dejar mi mejor versión. Un partido en el Real Madrid vale por 10 en cualquier otro club. Ojalá pueda jugar muchos partidos para este club, ganar muchos títulos y dar ejemplo a los niños ucranianos. Cualquiera puede lograr su sueño. Estoy orgulloso, es un momento histórico para todo el país y para mí personalmente", afirmó en declaraciones para Realmadrid TV.

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