Rodrygo, su idilio con la Champions y el mensaje de Ancelotti: "Es muy frío"

Noche de Champions League. Noche de Rodrygo Goes. El brasileño mantiene un idilio con la mayor competición europea a nivel de clubes casi desde su debut en ella. Este miércoles volvió a marcar, dando la victoria al Real Madrid en el último suspiro contra el Inter de Milán en San Siro.

Ya son seis los goles que lleva en Champions con tan solo 20 años. Tiene una extraña conexión con este torneo y él lo sabe: "Todas las veces que he jugado en Champions lo hice bien y generé algo bueno para mi equipo. Estoy muy contento porque me encanta marcar goles en la Champions", decía tras el partido. Tiene razón y es que suma seis goles y cinco asistencias: un gol cada 112 minutos y una participación en un tanto (gol o asistencia) cada 61 minutos.

Ayer salvó al Madrid y le dio sus tres primeros puntos de la fase de grupos. Salio al campo en el minuto 65 en sustitución de Lucas Vázquez, aunque el plan inicial de Ancelotti era que saliera a jugar Eden Hazard: "Pensé en sacarlo en la segunda parte, pero como el Inter cerraba muy fuerte el centro he decidido poner a jugador por banda, como Rodrygo y Vinicius para intentar atacar por fuera", confesaba el italiano después.

Los niños brillan

Con los brasileños en las bandas, al Inter se le empezó a hacer cada vez más complicado aguantar las embestidas del Real Madrid. La entrada al campo de otro 'niño', Eduardo Camavinga (18 años), terminó por decantar la balanza del lado blanco. Balón colgado de Fede Valverde al área, volea de Camavinga sin que bote el balón y remate de Rodrygo, también de primeras, para mandar el balón al fondo de las mallas.

Rodrygo Goes celebra con sus compañeros su gol al Inter de Milan REUTERS

Los niños del Madrid dieron la victoria al equipo y esto empieza a dejar de ser una anécdota. A Ancelotti se le cuestionó que dejara a Miguel Gutiérrez (20 años) en el banquillo: "Creo que tenemos jóvenes muy fuertes, con mucha calidad. Tenemos que meter experiencia, es normal en este tipo de partidos. El equipo tiene jóvenes con muchísima calidad", analizaba.

El técnico se rendía a Camavinga, que en dos ratitos ha demostrado su enorme potencial pese a ser el más pequeño del vestuario: "Es un jugador que puede jugar en el Real Madrid y lo hemos fichado por esto. Hay que ser pacientes con él para que tenga la oportunidad de progresar bien, lo está haciendo y es un jugador con mucha calidad; tiene que mejorar el aspecto defensivo y lo hará en el futuro".

El jardín de Rodrygo

Pero la estrella ayer fue Rodrygo. El brasileño, de momento, no ha sido titular en ningún partido esta temporada. De hecho, en los últimos dos compromisos ligueros se tuvo que conformar con jugar 7 y 2 minutos. Ancelotti le dio la oportunidad en San Siro y la aprovechó, vaya que si lo hizo. Tras el partido reclamó, a su modo, más minutos.

Ancelotti está encantado y le pide paciencia: "No es tan importante la cantidad de los minutos. Los que entran del banquillo pueden determinar el partido, Rodrygo ha tenido muy buen papel esta noche, no porque marcó en el último minuto, porque trabajó mucho en defensa. Su papel es el de un jugador importante que puede jugar desde el principio o entrar del banquillo y ser determinante".

"Es muy frío y marca goles", le definía Carletto. "La calidad la tiene", añadía. Mensaje recibido. Rodrygo, que ha visto desde el banquillo la reciente explosión de su amigo Vinicius, tiene claro cuál es el camino a seguir. Mientras tanto, su idilio con la competición favorita de todo madridista sigue.

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