Nicolo Barella es uno de los futbolistas más interesantes de la Serie A. El joven centrocampista del Inter de Milán y de la selección italiana es una de las piezas más importantes de los dos equipos. Tanto Simone Inzaghi como Roberto Mancini tienen mucha confianza en el joven al que le entregan la manija de sus equipos. 

Su gran talento y su capacidad para liderar la elaborción del juego le hacen ser un futbolista muy cotizado en su posición. Quedan pocos jugadores de sus características en el mundo. Además, tiene un físico muy característico de lo que fueron jugadores como Xavi Hernández o Andrés Iniesta. 'Jugones' y bajitos, pero con mucha calidad. 

De hecho, muchos analistas le han comparado con otro jugador de similar apariencia física, pero que todavía se encuentra al máximo nivel. Se trata de Luka Modric. El croata, aunque parece eterno, no lo es, y por eso en el Real Madrid se encuentran sondeando que tipo de jugador y qué perfil es más necesario para reemplazarle cuando este decida dejar el fútbol de élite o directamente retirarse. 

En los últimos años han sonado nombres como lo de Aouar, del Olympique de Lyon, y antes incluso Christian Eriksen, pero desde la entidad madridista nunca se han decidido a dar el paso para fichar un jugador parecido. Solo Dani Ceballos, con diferentes idas y venidas, y Martin Odegaard, han aspirado a ser los herederos del ganador del Balón de Oro en 2018. 

Sin embargo, desde hace un tiempo, la aparición de Nicolo Barella ha supuesto un cambio de paradigma en esta búsqueda. Muchos analistas y expertos han visto tantas similitudes entre ambos jugadores que los rumores sobre un posible interés del Real Madrid no han dejado de surgir. Lo cierto es que sería un fichaje muy acertado para los blancos teniendo en cuenta su liderazgo y su potencial. 

Además, Barella se encontraba en una situación contractual delicada y el Inter en un momento económico de verdadera necesidad. Ambas cirunstancias podrían haber acercado y facilitado esta operación. Sin embargo, todo hace indicar que estas barreras están a punto de derribarse y es que el mediocentro de la selección italiana está en conversaciones muy avanzadas con su club para renovar su contrato. 

Barella, cerca de renovar

De hecho, tal y como informa La Gazzetta dello Sport, la operación está prácticamente cerrada y blindará de manera considerable al jugador al club de Milán. Después de tener que vender a Lukaku este verano, el Inter no quiere dejar escapar a otro de los máximos exponentes de la plantilla. Barella es, seguramente, el mejor jugador del equipo junto a Lautaro Martínez. 

En Italia se apunta a renovación por cinco temporadas, ya que el Inter se quiere asegurar el rendimiento y la tranquilidad del menudo jugador a largo plazo. Además, para retenerle y esquivar sus problemas económicos, le han propuesto un aumento progresivo de su sueldo temporada a temporada.

Hasta 2023 pasará a cobrar unos tres millones de euros, mientras que a partir de ese año y hasta que concluya la ampliación, Barella pasará a tener un sueldo de galáctico de '7' kilos por curso. Sin duda, una cantidad que ya es muy considerable para pelear con los grandes de Europa que quieran llevársele. 

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