El Real Madrid está viviendo su particular Tourmalet de la temporada. Si la cuesta llega en enero, las rampas con las que el equipo de Carlo Ancelotti va a despedir el mes de diciembre nada tienen que envidiar a los muros que cada año Javier Guillén descubre la para La Vuelta. Aquí los porcentajes de infartos los están poniendo Sevilla, Athletic o Real Sociedad.
El equipo no ha abandonado todavía este espectacular encadenado montañoso ya que en el horizonte más cercano aparecen el Inter de Milán y el Atlético de Madrid, encuentros clave para seguir definiendo el futuro del conjunto blanco. Una victoria contra los italianos daría el primer puesto de grupo en la Champions de cara al pase a octavos y vencer a los colchoneros sería otro golpe encima de la mesa de La Liga.
La nota más positiva de este quebrado camino la está poniendo un Ancelotti que ha encontrado el desarrollo de gregarios de sus gregarios de lujo. El último en lanzar su demarraje ha sido Luka Jovic. El delantero serbio salió pasado el primer cuarto de hora del partido contra la Real Sociedad y después de muchas semanas sin jugar dejó una actuación portentosa.
Una asistencia genial a Vinicius para abrir la lata y un gol de cabeza de puro delantero, de tanque, de ariete de raza, ganando a la defensa y al portero en el área pequeña donde solo mandan los valientes. Jovic ha estado señalado por las críticas desde su llegada, pero parece haber subido al barco del Real Madrid justo en el momento más importante.
Con su gran partido en el Reale Arena, no solo brilló por los tangibles en el marcador, sino por su aportación al juego constante, confirma que el conjunto madridista tiene un nueve suplente. O quizás dos, tal y como pudo demostrar Mariano en el Martínez Valero de Elche antes de partirse, literalmente, la cara.
Ancelotti ya tiene su 'plan B' en marcha, ese que había sido tan demandado con la petición de rotaciones. Jovic quiere formar parte de él y ante la lesión de Benzema volverá a tener una oportunidad ante el Inter de Milán. Su continuidad será muy importante porque evitará prisas en el regreso del delantero francés y mostrará una vía fiable para darle más descanso en esta recta final del año 2021.
El medio se refuerza
Si la delantera ha ganado en competitividad y amenaza con el renacer de Luka Jovic, el centro del campo está viviendo algo parecido. Kroos, Casemiro y Modric parecían tan inamovibles como lo era Benzema en la delantera. El Real Madrid no tiene un jefe de filas, sino que tiene un trío que marca sus tiempos en la montaña, en el llano y en el terreno que se propongan porque han ganado batallas de todos los colores y sabores.
No obstante, van cumpliendo años y la carga de minutos está siendo alta, pero Ancelotti también tiene aquí otra arista de su 'plan B'. En las últimas semanas, el conjunto blanco ha echado mucho de menos a Fede Valverde, que se lesionó en la rodilla nada más salir en El Clásico y ha dejado algo huérfano el medio. Sin embargo, poco a poco va recuperando su mejor nivel y sin duda abre una puerta más a los cambios.
Además, el uruguayo, junto a Camavinga, es la alternativa más fiable que tiene el entrenador italiano. Cuando ellos salen, el equipo coge oxígeno y gana en fuerza para dar otro matiz diferente al centro del campo del líder de La Liga. Se gana también en verticalidad y las transiciones ataque-defensa son mucho más productivas. Por lo tanto, poco a poco, en el medio vuelve a haber relevo.
Perfilando el 'plan B'
El Real Madrid necesitaba este paso adelante de varios jugadores para darle garantías a Ancelotti de que se puede rotar. La dinámica es muy positiva con varias victorias consecutivas encadenadas, una situación que siempre dificulta meter cambios. Lo que funciona, para qué tocarlo se suele decir. Pero en este caso, es necesario meter alguna variante para poder dar descansos.
Y Ancelotti, aunque poco a poco, lo está haciendo. Se ha visto cumplir en defensa a Nacho cuando Militao o Alaba han tenido problemas. También a Lucas Vázquez, el protector de la fragilidad muscular de un Dani Carvajal renacido. Pero también hay jugadores que están sumando en esta causa como son Rodrygo o Asensio, que se disputan el extremo derecho a un nivel muy alto.
Poco a poco se va vaciando la enfermería y será momento para ver si nombres como Dani Ceballos, que todavía no ha debutado, o Gareth Bale, sin jugar desde agosto, pueden sumarse también a esta causa en la que ya se espera a un Marcelo que este año ha demostrado estar más implicado que nunca. El que pensara que el Real Madrid no tenía plantilla y fondo de armario parece que se equivoca, al menos de momento.
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