El Real Madrid vuelve este jueves a la competición y lo hace para afrontar los cuartos de final de la Copa del Rey. El rival es el Athletic y en el entorno merengue todo el mundo está pendiente de lo mismo: el regreso de los brasileños. Vinicius, Rodrygo y Casemiro vuelven desde Brasil después de que Éder Militao ya se adelantara a ellos al no jugar el segundo partido de su selección.

Los tres internacionales estuvieron presentes en la convocatoria de Tite para un partido que acabó en goleada (4-0) a Paraguay. Militao se había vuelto antes al estar sancionado, Casemiro se quedó sin jugar para alegría del Real Madrid y Rodrygo, que marcó, apenas disputó ocho minutos saliendo desde el banquillo. El que más jugó fue Vinicius, titular, aunque para alivio de su club solo disputó 61 minutos.

Vinicius no quería perder su oportunidad con Brasil, por lo importante que es el Mundial de Catar para el país, pese a que el Madrid ha tratado por todos los medios que se cuidara a los internacionales durante este parón tan fastidioso. Ancelotti y Tite hablaron por teléfono y, sin llegar a un pacto según el seleccionador, se informó que se cuidaría a los madridistas pensando en la cita del jueves en San Mamés.

Las 16:00 horas de este miércoles es el momento señalado para que Vinicius, Rodrygo y Militao aterricen en Madrid. Una hora después, a las 17:00, están citados en Valdebebas para entrenarse. Lo mismo con Fede Valverde, que una hora y media antes del Brasil-Paraguay jugó 74 minutos en la victoria de Uruguay contra Venezuela (4-1). En el entreno se tomará una decisión respecto a su entrada en la convocatoria.

La presencia de Vinicius se antoja casi imprescindible y la idea es que juegue. La ausencia casi confirmada de Karim Benzema deja en cuadro el ataque blanco, donde podría regresar Gareth Bale. Vini, con 15 goles y 10 asistencias en lo que va de temporada, es la segunda mejor baza ofensiva del Madrid y la primera sin Benzema.

Casi diez horas de vuelo

Si Vinicius acaba jugando, tal y como parece, será una paliza para él. En el momento en el que suene el pitido inicial en Bilbao habrán pasado solo 44 horas desde que arrancó el Brasil-Paraguay. Menos de 43 desde que Vinicius abandonó el terreno de juego. Entremedias un viaje desde Belo Horizonte, donde se jugó el partido, de casi diez horas de duración y alrededor de 8.000 kilómetros recorridos.

Los números de Vinicius

Pero no es nada nuevo que Vinicius se está exprimiendo esta temporada. Ha participado ya en un total de 30 partidos con el Real Madrid y apenas se ha perdido dos (Getafe y Alcoyano, en enero y por coronavirus). Además, de esa treintena de partidos jugados, solo ha salido de suplente en otros dos, que corresponden a las dos primeras jornadas de Liga en las que Ancelotti alineó a Hazard y Bale en los extremos.

Está claro que Vinicius es indiscutible desde hace tiempo en el Madrid. Tanto es así que es el cuarto futbolista más utilizado por Ancelotti esta temporada y el primero contando solo a los ofensivos. Suma 2.540 minutos jugados y solo le superan Thibaut Courtois (2.730'), Militao (2.724') y David Alaba (2.603'). Solo el portero y la pareja de centrales titular juegan más que él en este Madrid.

Jugar un partido con menos de dos días de intervalo entre uno y otro está al alcance de muy pocos. Vinicius muy posiblemente lo haga. Tiene un físico privilegiado a sus 21 años y así queda demostrado. El Real Madrid se aferra a su nueva estrella.

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