Jugada clave en el partido en el minuto 78. Eden Hazard se dirigía al área del Granada CF con el Real Madrid ganando 1-0 en ese instante. El belga sufrió una falta por detrás de Maxime Gonalons para evitar su avance y Mateu Lahoz lo tenía claro: penalti. En cambio, el VAR entró rápidamente para cambiar el parecer del colegiado que estaba sobre el campo. La acción se había producido mucho más atrás de que el jugador merengue pisase la zona del campo que protegía Luis Maximiano.

Partido con la inequívoca firma de Mateu Lahoz. El colegiado elevó el listón, sin amonestar en las faltas que señaló y mostrando tarjetas solo por las protestas a Modric y Gonalons, así como a Asensio por quitarse la camiseta tras el gol. Lo que no pudo evitar el árbitro fue un par de errores claros. Uno perjudicó al Real Madrid, mientras que el otro iba camino de beneficiar a los locales hasta que entró el VAR. En líneas generales, la polémica no tuvo un resultado directo sobre el marcador.

En el primero, señaló un riguroso braceo de Valverde sobre Torrente, que cayó al suelo llevándose la mano al rostro mientras el madridista se quedaba solo ante Maximiano. Mateu Lahoz pitó falta inmediatamente. Sin embargo, en la repetición se ve como el uruguayo no golpea en la cara a Torrente, que no podía parar la progresión del atacante. No quiso esperar a que terminase la jugada, algo que habría podido significar que revisara la acción el VAR.

Después ya llegó la jugada de la discordia. Ya en las postrimerías, con el 1-0, Gonalons persiguió con torpeza a Hazard y pisó el talón del belga, que cayó dolorido dentro del área. El árbitro advirtió el pisotón y señaló penalti. No obstante, el VAR actuó y corrigió la decisión del valenciano, ya que en la repetición se observaba que la falta ocurrió fuera del área. Toni Kroos la lanzaría y el balón se iría manso a las manos de Maximiano.

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