Noche de locura en el Santiago Bernabéu. El Chelsea consiguió dar la vuelta a la eliminatoria y se llegó a poner 0-3 en el segundo tiempo. Sin embargo, Modric apareció y Rodrygo mando el partido a la prórroga. Vinicius y Benzema volvieron a hacer la de la ida en el tiempo extra y Karim clasificó al Real Madrid a semifinales con un cabezazo. [Narración y estadísticas: Real Madrid 2-3 Chelsea]
El Chelsea completó un encuentro magnífico. El campeón cayó con honores ante el rey de Europa. El Real Madrid, que pareció muerto, tuvo que volver a tirar de épica para lograr un pase que sabe mejor por cómo sucedió. Los goles de Mount, Rüdiger y Werner parecían definitivos, pero ahí estaban dos viejos rockeros como Modric y Benzema para un nuevo baile.
Benzema es, o debe ser, el Balón de Oro 2022. Nadie se acerca a su nivel esta temporada. Pero, además del francés, el croata tiró del carro para lograr el imposible cuando todo parecía perdido. Un pase con el exterior a Rodrygo y el partido a la prórroga. Allí, donde el fútbol se vuelve loco, volvió a ganar el Real Madrid.
Tuchel aprendió de la superioridad del Real Madrid en la ida e igualó las fuerzas en la medular metiendo a un centrocampista más con Loftus-Check. Además, puso a Werner y Havertz con Nacho y Alaba para castigar cualquier error en defensa. Y así llegó el gol que metió de lleno al Chelsea en la eliminatoria.
Se cumplía el primer cuarto de hora cuando Mount consiguió colarse entre Carvajal y Nacho para fusilar a Courtois y hacer el 0-1. No había habido grandes ocasiones hasta entonces, pero el equipo inglés sacó petróleo de su primer acercamiento con peligro al área del Real Madrid.
El conjunto de Carlo Ancelotti rozó el empate con un disparo de Benzema que tocó en Thiago Silva y se fue fuera por poco, pero solo fue un espejismo. El Chelsea dominaba y el Real Madrid apenas lograba encadenar un par de pases seguidos. Sin embargo, Courtois no tuvo más trabajo en toda la primera mitad.
El partido era de mucho centro del campo y poca actividad en las áreas. El Real Madrid no sufría, pero la imagen también distaba mucho de la exhibida en Stamford Bridge. El Chelsea demostraba en el Santiago Bernabéu por qué es el actual campeón de la Champions.
El sueño del Chelsea
La situación empeoró para el Real Madrid tras el descanso. En el minuto 51, Rüdiger empató la eliminatoria con un cabezazo tras un córner que no era. El Chelsea arrinconaba así al conjunto blanco y conseguía lo más difícil. El semifinalista se decidiría en menos de 40 minutos. La renta de Londres se había evaporado para el equipo de Ancelotti.
El Real Madrid despertó ante la necesidad. Kroos obligó a volar a Édouard Mendy en un lanzamiento de falta y Fede Valverde estuvo a punto de marcar con un disparo lejano y duro. El drama llegó al Santiago Bernabéu cuando el equipo de Ancelotti estuvo eliminado por segundos. Marcos Alonso tira, golpea en Carvajal y en el rechace el balón le toca en su mano derecha antes de fusilar a Courtois. Era el 0-3, pero el VAR dictó sentencia y dio una vida extra al Real Madrid.
El encuentro entró en ese momento en la locura. Todo era posible. Benzema estrelló un cabezazo en el larguero, pero el Chelsea continuaba avisando. Ancelotti buscó en Camavinga un revulsivo y puso al francés por un Kroos poco acertado. Por su parte, Tuchel sabía que tenía las mejores piezas sobre el césped para batir al Real Madrid.
La tragedia pareció completa en el minuto 75. Werner amaga para mandar al suelo a Casemiro y después logra marcar. El balón entró llorando tras tocar en Courtois, para más inri. El Real Madrid estaba tocado y casi hundido. Ancelotti apostó el todo por el todo con un doble cambio: Marcelo y Rodrygo por Mendy y Casemiro.
La fe del Real Madrid
Y el cambio le salió bien a Ancelotti. Modric se inventó un pase con el exterior, ¡qué pase!, para levantar al Santiago Bernabéu y que Rodrygo marcara el 1-3. Otra vida más. Otra vez. La Copa de Europa. El Real Madrid. La Copa de Europa y el Real Madrid.
Para darle aún más emoción, Nacho se lesionó y Ancelotti puso a Carvajal de central y a Lucas Vázquez de lateral derecho. El más difícil todavía. La noche era de emociones fuertes y Pulisic tuvo dos oportunidades para clasificar al Chelsea antes de llegar al final del tiempo reglamentario. Sin embargo, la eliminatoria merecía una prórroga y la tuvo.
En la épica, el Real Madrid manda y lo volvió a demostrar. Del todo perdido con el 0-3 a la alegría cuando Benzema marcó en el minuto 96. Camavinga roba y se la pone larga a Vinicius y este la pone para que Karim marque de cabeza otra vez, como en la ida, y se consagre como el hombre de esta Champions. Cuatro tantos en la eliminatoria. Siete entre octavos y cuartos. Bestial.
La segunda parte de la prórroga se hizo eterna. El cansancio hizo acto de presencia y el Chelsea pudo empatar con un cabezazo de Havertz que se fue fuera. Poco a poco la eliminatoria, que parecía interminable, murió a poco a poco entre balón y balón colgado al área del equipo inglés. La épica del Real Madrid aparece hasta cuando todo se tuerce. Es la Champions y es el Real Madrid.
Real Madrid 2-3 Chelsea
Real Madrid: Courtois; Carvajal, Alaba, Nacho (Lucas Vázquez, 88'), Mendy (Marcelo, 78'); Casemiro (Rodrygo, 78'), Kroos (Camavinga, 73'), Modric, Fede Valverde; Vinícius (Ceballos, 115') y Benzema.
Chelsea: Mendy; James, Thiago Silva, Rüdiger, Marcos Alonso; Kanté (Ziyech, 100'), Kovacic (Jorginho, 106'), Mount; Loftus-Cheek (Saúl, 106'), Werner y Havertz.
Goles: 0-1, 15' Mount. 0-2, 51' Rüdiger. 0-3, 75' Timo Werner. 1-3, 80' Rodrygo. 2-3,96' Benzema.
Árbitro: Szymon Marciniak (POL). Amonestó a Benzema (37), Valverde (68), Camavinga (92) y Carvajal (118), por el Real Madrid; y a James (10), Ziyech (102), Havertz (109), Azpilicueta (114) y el técnico Tuchel (114), por el Chelsea.
Incidencias: encuentro de vuelta de los cuartos de final de la Liga de Campeones, disputado en el estadio Santiago Bernabéu ante unos 61.000 espectadores.