Con el Santiago Bernabéu en efervescencia, llegó la culminación de la remontada del Real Madrid. Ruben Dias cometió un claro penalti sobre Karim Benzema a los tres minutos de prórroga. Daniele Orsato no dudó ni un solo segundo. El VAR también ratificó la infracción y los blancos, que le habían dado la vuelta al marcador con dos tantos de Rodrygo en 90 segundos, tenían oportunidad para firmar el pase a la final. El jugador de fútbol francés lo certificó anotando desde los 11 metros. Era el 3-1.
Cuando el Manchester City rozaba su segunda final de Champions League de manera consecutiva, Rodrygo Goes, con un doblete en el añadido del segundo tiempo, mandó el partido a la prórroga y volvió a evidenciar la épica del Real Madrid en este torneo. Durante el tiempo reglamentario no le salieron las cosas a Karim Benzema, pero el francés no quería faltar a su citad con el gol. Después de un centro raso, el delantero se adelantó a Rúben Dias dentro del área y el luso cometió penalti.
Con la incertidumbre de si Benzema volvería a lanzarlo 'a lo Panenka' como hizo en la ida, el internacional con 'Les Bleus' no se complicó y mandó el esférico a su derecha, mientras que Ederson se lanzó al lado equivocado y no pudo evitar el tanto. Volteó la eliminatoria el Madrid, que con el 3-1 se colocó en la final de Saint-Denis. Una noche más en la larga historia de amor del 13 veces campeón de Europa en esta competición.
Rúben Dias no está acostumbrado a fallar. En el Manchester City ha demostrado que es un central de primer nivel, un líder. Pero incluso los líderes pueden cometer errores. Y el central portugués lo hizo. En la prórroga de una eliminatoria en la que el Real Madrid había logrado sobrevivir no se sabe bien cómo, el luso pecó de inocente y cometió una pena máxima que Benzema no falló. Era el 3-1 que ponía a los blancos con pie y medio en la final de la Champions.