Momento precioso con el que comenzó el último partido de La Liga. Real Madrid y Real Betis se hicieron un pasillo mutuo en el Santiago Bernabéu. El doble pasillo al campeón del campeonato nacional de fútbol y de la Copa del Rey marcó la previa del choque de la última jornada. Primero fueron los blancos los que aplaudieron la salida al campo de los béticos y, tras ese gesto, llegó el momento en el que los verdiblancos rindieron homenaje a los merengues.
El partido que se ha disputado en el Santiago Bernabéu ha enfrentado a los equipos que se han proclamado campeones de La Liga y la Copa del Rey esta temporada. Por esta razón, en los prolegómenos del encuentro se ha visto una imagen especial. Ambos equipos protagonizaron un doble pasillo en reconocimiento a los títulos conseguidos por ambos equipos en el curso que finaliza este fin de semana. Una acción que otros clubes se resistieron a hacer.
El primero en hacer los honores al rival ha sido el conjunto de Carlo Ancelotti, y seguidamente han sido los jugadores béticos han sido los que han hecho el pasillo de honor al Real Madrid. El Atlético de Madrid no quiso hacerlo en el derbi del Wanda Metropolitano. En el caso del Real Betis, se ha repetido lo ocurrido en los encuentros del campeonato 2021/2022 de Primera División jugados después de lograr el título de campeón de la Copa del Rey el pasado 23 de abril.
Fue un pasillo marcado también por el tifo que la Grada Fans del Real Madrid realizó en el Fondo Sur del Bernabéu, pensando ya en la final de la Champions League: "El rey de Europa siempre vuelve", se podía leer junto a una imagen de la Torre Eiffel, haciendo referencia a que la final se jugará en París, en el Stade de France, habitual casa de la selección francesa. La final se empezó a jugar en el estadio merengue este viernes.
El colofón lo puso Alejandro Sanz, afamado cantante español a nivel mundial y confeso madridista, que recibió el cariño de la afición e hizo el saque de honor. Ambiente de fiesta en el Bernabéu antes de un partido con poca historia y que Ancelotti usó como ensayo general para la final ante el Liverpool del día 28 de mayo.