Las vacaciones de verano van llegando a su fin para los futbolistas del Real Madrid. Unos regresaron a Valdebebas este viernes y otros lo irán haciendo los próximos días. Durante las últimas semanas, todos ellos han descansado y se han divertido con sus familias y sus amigos. Es el caso de Fede Valverde y su pareja Mina Bonino. Ellos pasaron unos días en Ibiza, aunque no todo fue lo bien que podían esperar.
El inicio de su viaje a la isla fue toda una pesadilla. El pasado 25 de junio aterrizaban en su destino dispuestos a pasar unas vacaciones idílicas, pero todo se veía arruinado de buenas a primeras tras su noche de llegada: sufrieron un robo en la vivienda que alquilaron. Mina Bonino ha contado lo que ocurrió e incluso duda de si fueron drogados para que no se percataran del robo en ese preciso momento.
"Cuando llegamos a la casa, ya estaba el cocinero", comenzó a relatar Mina en su Instagram. "Me dice en ese momento que solo había una llave y que se la iba a llevar para al otro día volver a hacer el desayuno y no molestarnos". A la pareja no le pareció extraño y no se podían imaginar lo que sucedería esa misma noche, aunque algunas cosas como luces de la casa "que se apagan solas" ya no les encajaban.
Al despertarse se encontró el desastre: "Al día siguiente yo no podía ni levantarme. Le mandé un mensaje a Leslie -su asistenta- para que se llevara a mi hijo porque a mí me daba vuelta todo. Yo me sentía muy mal, pero pensé que era porque soy muy pajera y estoy en muy mal estado físico".
Y añadió: "A la hora bajo y veo mis tres maletas en el salón. Había chanclas mías tiradas y Leslie estaba ordenando todo. Ella me dijo: '¿estuviste buscando algo?'. Como todavía estaba drogada me habré reído, no entendí un carajo y seguí con la mía". Siguió: "Nadie en ese momento tuvo luz para decir 'che, me parece que esto no es normal'. Todos dieron por entendido que soy capaz de dejar todo tirado".
Entonces, dispuesta a pasar el día fuera de casa con su familia y sus amigos, Mina fue a coger dinero de la cartera y se dio cuenta de que este había desaparecido: "Ahí empecé a tener un ACV pensando en qué momento, cómo y dónde estaba el dinero. Ahí apareció el cocinero diciéndome que él cuando llegó vio todo desordenado".
Las sospechas crecieron por lo que dijo después el cocinero: "No quiero seguir con el servicio. No estoy cómodo con la gente que trabaja en la inmobiliaria porque esto siempre sucede con ellos", diría el empleado antes de emprender su marcha de la vivienda.
Análisis de sangre
"Vinieron los de la inmobiliaria. Metieron un acting hermoso donde nos dijeron que la comida podía estar envenenada porque ellos creían qué había sido el chef, así que nos llevaron al hospital a hacernos análisis de sustancias", contó sobre lo que sucedió después.
Mina Bonino contó cómo fueron esos test: "Los análisis mostraban si tenía cocaína, marihuana, éxtasis, anfetaminas o antidepresivos en sangre. Todo muy sutil para que nos desvalijen la casa y no me entere, rey. Pasamos nuestro primer día en el hospital. Vomitada por mi amiga y robada por algún conocido que me vio dormir en pelotas y es lo que más me perturba", concluyó.