El fichaje de Antonio Rüdiger a sus 29 años por el Real Madrid despertó una postura generalizada en el mundo del fútbol: otro golpe encima de la mesa de Florentino Pérez. El conjunto blanco se hizo con uno de los mejores defensas de toda Europa a coste cero y uniéndose a la mejor pareja de centrales del mundo: Eder Militao y David Alaba. De esta forma, Carlo Ancelotti tendrá un ejército defensivo que inexpugnable. Sobre todo, porque el italiano está usando al alemán para todo.
La afición del Real Madrid está acostumbrada a tener un defensa así con Nacho Fernández, pero ahora contarán con otro al mismo nivel o un punto por encima. Rüdiger ya ha jugado en todas las posiciones de la zaga, dándole a Ancelotti la posibilidad de tener más opciones mientras esté en el terreno de juego así como cuando parta desde el banquillo. 'Toni' no ha jugado como titular todavía, pero le da a la plantilla más profundidad.
Además, este miércoles ya ganó su primer título con el Real Madrid. Rüdiger repitió con la Supercopa de Europa, en la que fue héroe la pasada temporada al marcar el gol de penalti que le dio el trofeo al Chelsea. En esta edición fue más discreto saltando al terreno de juego desde el banquillo. Pero su influencia sobre el partido tendrá calado durante la temporada por la posición que ocupó sobre el terreno de juego del Olímpico de Helsinki.
Todo comenzó con el amistoso ante el FC Barcelona. Ancelotti decidió colocar a Rüdiger los segundos 45 minutos de El Clásico de Las Vegas en el lateral izquierdo sustituyendo a Ferland Mendy. El alemán demostró su habilidad para conducir el balón para llegar hasta al área contraria, así como está preparado para defender a cualquier altura del campo. Su velocidad con y sin balón le permiten correr la banda para corregir a sus compañeros, perseguir extremos con desborde e incorporarse a las jugadas de ataque.
Ante el América de México reduciría el número de minutos. Solo disputaba la última media hora del encuentro entrando por Jesús Vallejo. Ahí regresaba a la posición que se le entiende por natural: la de central. El alemán se movió tanto por el lado derecho como por el izquierdo. Ahí se pudo ver su capacidad para defender a campo abierto, así como que va excelentemente por arriba tanto para atacar como para sacar balones de su propia área. Demostró que es un muro para los rivales.
Ancelotti siempre le dio un rol de suplente en la pretemporada. También saltó al campo frente a la Juventus de Turín tras el descanso para disputar otros 45 minutos, en esta ocasión sustituyendo a Eder Militao. Sustituir al brasileño es una tarea compleja, pero lo hizo a la perfección. Mantuvo el muro que levantó el Real Madrid en su mejor partido de preparación y subió un punto más su nivel. También dejó la impronta de sus disparos más que interesantes.
Y al fin llegó el gran día del debut. Rüdiger se estrenó en Helsinki jugando sus primeros cinco minutos de manera oficial con el Real Madrid. La sorpresa fue cuando la tablilla del cuarto árbitro indicó el número de Dani Carvajal. Ancelotti le hacía saltar al campo para jugar como lateral derecho. En esta posición sí se había desarrollado en el pasado, pero hacía bastante tiempo que no jugaba. Ahí se le vio también subiendo bastante al ataque.