El Real Madrid afronta este domingo uno de los primeros partidos importantes de la temporada. Se trata de El Derbi contra el Atlético de Madrid. Un partido que va a estar marcado por la polémica que ha rodeado a Vinicius y a Koke. El capitán rojiblanco atacó a la estrella del eterno rival y esta se defendió generando una importante corriente de apoyo a su favor.
Sin embargo, más allá del absurdo enfrentamiento que se ha generado desde el bando colchonero está la importancia del partido. Esa por la que apuesta el Real Madrid, quien solo tiene en mente pelear por los tres puntos para superar al Barça en la clasificación y conseguir ese 18 de 18 que prorrogaría su inmaculado inicio de temporada.
El Derbi contra el club rojiblanco en el Civitas Metropolitano a las 21:00 horas será la primera vez que dos jugadores del Real Madrid se midan a uno de los grandes rivales históricos del país. Uno será Antonio Rüdiger, quien no apunta a titular después de haberlo sido en Champions contra el RB Leipzig. El otro, Aurélien Tchouameni.
[Rodrygo se gana un puesto en El Derbi: el escudero perfecto de Vinicius y el recambio de Benzema]
El mediocentro francés estará, salvo sorpresa de última hora o problema físico, en el eje del centro del campo del Real Madrid escoltando a los dos jugones habituales, Luka Modric y Toni Kroos. Será su primera vez en un partido caliente con la camiseta más exigente del mundo. Una prueba de fuego que no podrá eludir y en la que tendrá la oportunidad de demostrar por qué el Real Madrid apostó decididamente por él este verano poniendo encima de la mesa más de 80 millones de euros.
Tchouameni, prueba del algodón
Aurélien Tchouameni ha sido uno de los nombres propios del Real Madrid en los últimos meses. Al principio, con la enorme pelea que se generó por su fichaje entre el conjunto blanco, el Liverpool y, sobre todo, el PSG. Florentino Pérez apostó fuerte por su contratación y la entidad merengue terminó dando el golpe que todos esperaban y demandaban en el mercado.
Llegó y desde los primeros entrenamientos deslumbró. Su potencia y su poderío eran todavía más arrasadores de lo que imaginaban. Esa "energía" de la que tanto habla Ancelotti para definir a su nuevo Real Madrid. Pero además sorprendió porque su calidad técnica y su madurez muy po encima de lo esperado. Con esas credenciales debutó en los primeros partidos y lo hizo a las mil maravillas.
Después llegó la marcha de Casemiro al Manchester United y Tchouameni se vio obligado a dar un paso hacia delante mucho antes de lo esperado. Pero volvió a demostrar una enorme capacidad de adaptación y sobre todo de liderazgo, ya que no le tembló el pulso a la hora de afrontar la responsabilidad de suplir a una leyenda como el brasileño.
[Camavinga, a por el Golden Boy: Ansu Fati, Jude Bellingham y Pedri, sus principales rivales]
Equipos como el Celta o el Espanyol ya saben cómo se las gasta un Tchouameni que en sus primeros meses en Madrid se ha ganado más crédito del que nadie imaginaba a pesar de ser un futbolista por el que se había pagado mucho dinero.
Ahora, el galo tiene su primer partido importante después de haber rendido bien en Liga y de haber resuelto bien sus primeros partidos en Champions, especialmente en el Santiago Bernabéu, donde esa competición se transforma. El Derbi es un partido especial y Aurelien tendrá la oportunidad de descubrirlo este próximo domingo cuando a las 21:00 horas se desate en el Civitas Metropolitano una guerra sin cuartel.
Ante el gran enemigo
El Derbi promete ser un partido caliente. De esos de meter la pierna fuerte. El Atlético de Madrid es un equipo que destaca mucho más por su capacidad física y por su músculo que por su calidad técnica. La imaginación la ponen Joao Félix y Carrasco, pero a la batalla van los Kondogbia, Marcos Llorente, Witsel, Mario Hermoso, Reinildo y compañía.
Por ello, un jugador como Tchouameni en el centro del campo será fundamental. Él tendrá que correr y trabajar hasta donde hombres finos como Kroos y Modric no puedan llegar. En los momentos de tener el balón serán su oportunidad para descansar. Pero cuando haya guerra, tendrá que sacar a relucir todo su músculo y su fortaleza para sostener al equipo. Sobre todo cuando el partido se ponga duro y cuando las entradas abajo empiecen a hacerse más frecuentes. Algo que nadie duda que ocurrirá.
[El Chelsea se entromete en la llegada de Bellingham al Real Madrid: prepara una oferta mareante]
Tchouameni tendrá además una misión muy particular. Como pieza más defensiva del centro del campo, uno de sus cometidos más habituales será detener a la única fuente que puede generar algo de fútbol en la medular del Atlético de Madrid. Y esa es Koke Resurrección. Sí, el mismo que se ha encargado de calentar el partido poniendo a Vinicius en el ojo del huracán.
El francés tendrá muchos duelos contra el mediocentro de la Selección y tendrá que mantenerse frío, evitar faltas tontas y tarjetas innecesarias para no ocasionar un problema a Carlo Ancelotti. Sobre su figura se generará mucho morbo, ya que muchos madridistas están especialmente molestos con la actitud que ha tenido Koke en las últimas horas.
Todos ellos esperan que Tchouameni se coma al capitán del Atlético de Madrid y que haga de su Derbi una auténtica pesadilla. Ganar ese duelo y contribuir a que el Real Madrid domine el centro del campo y el partido le servirá para que aquellos que todavía dicen que no ha demostrado nada en un partido grande y que por eso son escépticos a su talento y a su imparable progresión.