Jamás lo ha ocultado. Siempre ha sido claro. Uno de los grandes sueños de Vinicius desde pequeño era triunfar con la Selección de Brasil. No le bastaba con vestir la camiseta del combinado de su país, quería ser alguien importante y lograr títulos ante los ojos del resto del mundo. Y todavía buscaba ir un paso más allá porque en los últimos meses estar presente en el Mundial de Qatar se había convertido para él casi en una obsesión como gran competidor que es.
Ahora, se puede decir que tiene ese último objetivo al alcance de la mano y que se lo ha ido ganando por méritos propios. A Vinicius le ha costado mucho convencer a Tite de que puede ser uno de los grandes referentes de Brasil. Ha tenido que insistir una y otra vez. Ha tenido que ser paciente y esperar su oportunidad. Y sobre todo ha tenido que ir sumando en el Real Madrid exhibición tras exhibición para no dejarle a su seleccionador más alternativa que la de rendirse a sus pies.
Vinicius es en la actualidad una de las grandes referencias por supuesto del conjunto blanco pero también de la Selección brasileña. La Canarinha es una de las principales favoritas para hacerse con el título en el próximo Mundial y en ello tiene mucho que ver el delantero madridista y su impresionante estado de forma. Enfrentarse a Vinicius supone, en la actualidad, una fuente inagotable de problemas para cualquier defensa.
Un camino duro
El delantero siempre lo ha tenido muy claro. Cuando pocos creían a ciegas en sus posibilidades, él nunca bajó los brazos. Por eso, su historia con Brasil y con Tite ha sido un tanto tortuosa y ha durado prácticamente tres años hasta que ha conseguido convencer por completo a su seleccionador.
En febrero de 2019 Vinicius fue llamado por primera vez a filas con Brasil. Los sudamericanos tenían dos compromisos amistosos por delante que iban a servir de fuente de pruebas y Tite decidió darle la alternativa al del Real Madrid. Los rivales a batir eran Panamá y la República Checa, dos equipos asequibles y, sobre el papel, idóneos para que Vini cogiera confianza.
Sin embargo, la mala suerte se cruzó en el camino del brasileño. Una lesión en el tobillo le dejó fuera de los terrenos de juego y se quedó sin poder cumplir una de las grandes ilusiones de su vida.
Esta lesión no solo le cortó las alas en aquel momento sino que le iba a condicionar en un futuro inmediato. Aquel verano de 2019 se jugaba la Copa América y cualquier jugador brasileño quiere estar con su Selección en ese momento. También Vinicius, por supuesto, pero la falta de minutos en el Real Madrid hizo que Tite se decantara por otras opciones que parecían más seguras. Sus compañeros Casemiro y Militao, que firmaría aquel verano por el conjunto blanco, sí que fueron convocados.
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Consigue debutar
Pero Vinicius es experto en caer y levantarse, en intentarlo una y otra vez así que se puso manos a la obra. Después de aquella Copa América se abrió una nueva ventana de selecciones y Tite volvió a llamarlo. No era fácil, porque el grupo había ganado recientemente la Copa América, pero Vinicius se lo había ganado.
En el primer partido amistoso ante Colombia no pudo pisar el terreno de juego pero su momento más emocionante llegó con el debut, en el siguiente choque, ante Perú. Faltaba cerca de un cuarto de hora para el final y entró para sustituir a Richarlison. En lo personal, supone un recuerdo imborrable para Vini pese a que en lo colectivo Brasil perdiera ante Perú.
Aquel debut en el mes de septiembre de 2019 es algo que a Vinicius nunca se le borrará de la memoria, aunque también dio paso a una época de mucha incertidumbre. Como si se hubiera sentido defraudado, Tite dejó de llamarlo.
Sin convocar
En las siguientes dos ventanas internacionales Vinicius se quedó sin viajar a Brasil. Ni en el primer parón de amistosos ni en el segundo de clasificación para el Mundial consiguió entrar en los planes de Tite. Sí que aparecía en aquellas listas, por ejemplo, su compañero Rodrygo, así que a Vinicius no le quedó más remedio que seguir trabajando duro en el Real Madrid.
Posteriormente, otras dos ventanas de selecciones más y buenas noticias para el delantero, aunque a medias. Tite decidió volver a incluir a Vini entre sus planes pero no le dio ni un solo minuto en el terreno de juego. Mientras tanto, su rendimiento en el Santiago Bernabéu no hacía más que seguir mejorando jornada tras jornada.
Es cierto, no obstante, que al delantero se le seguía achacando cierta falta de puntería hacia la portería rival. Sus dotes de desequilibrio eran irrefutables pero a Vinicius todavía le faltaba dar un salto en el aspecto anotador.
No obstante, la mejoría de Vinicius poco a poco era evidente y por eso Tite se lo llevó a la Copa América del pasado verano. Formó parte de la lista de elegidos pero no fue ni mucho menos la competición que recordará para el resto de su vida porque tuvo un protagonismo muy inferior a lo que él esperaba.
Brasil se plantó en las semifinales del torneo y lo hizo con Vinicius jugando poco más de 30 minutos en el cómputo global de todos los partidos. Es decir, que el jugador del Real Madrid tan sólo contaba con minutos residuales. En las semifinales y en la final tuvo su oportunidad, es cierto, aunque todo quedó todavía más empañado con la derrota ante Argentina en aquel último partido.
Al fin, titular
Uno de los días más especiales para Vini será el 3 de septiembre de 2021. Aquella fecha permanecerá en su recuerdo porque debutó como titular con Brasil. Al fin, Tite confió en él desde el inicio y lo hizo en un partido de clasificación para la Copa América ante Chile que además terminó con victoria.
Esta fue la temporada además en la que Vinicius explotó de manera definitiva como crack mundial en el Real Madrid. Lideró junto a Benzema el ataque del conjunto blanco de una manera impresionante y fue ganando en confianza. Se convirtió en un dolor de cabeza para los defensas rivales y destapó el tarro de los goles ante el planeta entero.
Sus actuaciones vestido de blanco fueron fundamentales para el triplete (Supercopa de España, Liga y Champions League) y por si fuera poco terminaría el curso marcando el gol en la final de la Champions ante el Liverpool. Unas actuaciones que no le dejaron más remedio al seleccionador de Brasil que empezar a confiar en Vinicius como titular habitual.
Desde aquel partido ante Chile, el delantero del Real Madrid se ha convertido en una pieza imprescindible también para su Selección. Es titular, se entiende con los peces gordos como Neymar y no hay quien le baje de la nube ahora mismo. Le costó entrar y ganarse la confianza del míster, pero ahora mismo no se contempla otra opción que la de Vinicius formando parte de Brasil para el Mundial de Qatar y siendo una de las estrellas del torneo.