Kylian Mbappé promete ser uno de los grandes protagonistas del próximo Mundial. Francia es una de las grandes favoritas al título. De hecho, es la actual campeona, trofeo que consiguió en Rusia en el año 2018. Ahora, el equipo de Didier Deschamps tendrá que ejercer la defensa de su corona y el futbolista del PSG será una de sus grandes referencias.
Antes de la gran cita, una persona muy importante de su entorno ha roto su silencio. Se trata de su padre Wilfrid Mbappé. El progenitor del talento de Bondy ha sido una figura trascendental en su carrera. Ahora, al igual que su madre Fayza Lamari, tiene gran poder en la toma de decisiones de tu hijo como sucedió este verano con su permanencia en el PSG en lugar de su fichaje por el Real Madrid.
Sin embargo, la carrera de Mbappé ha estado ligada a la figura de su padre Wilfrid desde que era un niño. Él fue su primer entrenador: "No me llevé a Kylian conmigo de inmediato. Quería que viniera de él, pero como estaba rompiendo todo en casa jugando en el salón, terminé llevándolo cuando tenía 4 años a un equipo de principiantes. Les faltaba un jugador. Entonces él se puso una equipación cinco veces más grande y salió. Todos los pequeños corrían menos él. Se quedó frente a la portería esperando para marcar gol. Sin ningún desplazamiento. Y repetía: 'No corro, juego al ataque'. Después hubo que explicarle dos o tres cosas".
[En el PSG quitan poder a Kylian Mbappé: colocado al mismo nivel que Leo Messi o Neymar]
Así lo cuenta en una entrevista para France Football en la que desvela que consiguió inculcarle cuáles eran sus principios básicos y su manera de entender el fútbol: "Tenía que jugar con locura, generosidad, fantasía". Además, desvela que tiene grandes anécdotas de los años de formación de Kylian.
"Durante un torneo de debutantes en Charny, cerca de Auxerre, marcó bastantes goles. Llegamos a la final pero, el líder del equipo contrario se quejó contra Kylian: 'Hace cosas que un novato no puede hacer'. Sin embargo, Kylian era el más bajo de todos. Y de lejos. Tuvimos que mostrarle su licencia. Es la primera vez que me digo: 'Todos se han dado cuenta'. Posteriormente, lo tuve hasta el Sub17, excepto dos temporadas". Mbappé no tardó en destacar y deslumbrar a todos con su calidad.
[Polémica por el gesto obsceno de Kylian Mbappé: Kays Ruiz-Atil, del Auxerre, responde]
Los enfrentamientos con Kylian
Sin embargo, no todo era tan fácil. Wilfrid y el propio Kylian tenían miedo de romper su relación por motivos deportivos. Por eso decidieron llegar a un acuerdo: "Los dos hicimos un pacto sobre todo para no pudrirnos ni dañar nuestra relación, teníamos que dejar los problemas futbolísticos en el campo. Aunque pudiera haber resentimiento, desilusión o enfado, todo tenía que quedar fuera de casa. A veces, cuando no quieres pasar por un entrenador que muestra favoritismo, puedes ir demasiado lejos".
Mbappé fue creciendo y se hizo profesional, pero sus primeros pasos en el Monaco no fueron nada sencillos: "Con los problemas que tuvo Kylian al principio en Mónaco, que se encontró en el banquillo, la situación era complicada para mí y para él. Fue su primer revés. Lloraba todos los días. Pero lo más difícil fue que no hubo mucha explicación. Me negué a intervenir porque también me puse en el lugar del entrenador, a quien no le gusta mucho que los padres se involucren".
[Mbappé: "Pensé que no podía jugar para la gente que cree que soy un mono"]
Poco a poco, el sufrimiento de Kylian hizo ver a su padre que se equivocaba: "Sin embargo, acabé mandando a paseo a esa solidaridad de colegas cuando vi que Kylian caía para tratar de encontrar una explicación y una solución. Estaba enfadado conmigo mismo porque tenía la sensación de no haberme preparado bien para esta etapa. No me preocupaba demasiado porque todo el mundo me llamaba para darle la bienvenida si se iba de Monaco. Pero tal vez fui demasiado amable".
Mbappé consiguió darle la vuelta a la situación y mostrar su personalidad, la cual se resume en una anécdota en el autobús del equipo que desvela así: "Cuando me contaron la anécdota, le pregunté por qué. Me explicó: 'No quería sentarme en un lugar que era de otra persona. Dejé que todos se sentaran. Y me puse donde estaba disponible'".