Un Clásico siempre levanta unas expectativas que difícilmente alcanza cualquier otro partido, pero si además este enfrentamiento se produce en una final, las emociones se disparan. El Real Madrid y el Fútbol Club Barcelona se citan en un cara a cara apasionante para definir quién de los dos se proclama esta temporada campeón de la Supercopa de España.
Es un choque, en cierto modo, de supervivencia. Ninguno de los dos equipos está en su mejor momento ni de lejos y para muestra las semifinales. Los dos fueron sometidos por momentos por sus rivales y tuvieron que ir a la tanda de penaltis para certificar el pase de eliminatoria. El juego de madridistas y culés no maravilla, y además varios de los jugadores que han estado en el pasado Mundial todavía no terminan de encontrar su mejor versión.
El que piense que el Real Madrid parte como favorito tiene motivos para ello. Al fin y al cabo, es el vigente campeón de la competición y desde que la Supercopa se disputa en Arabia Saudí ha ganado dos de las tres ediciones. Tiene al mejor portero de mundo y una delantera que mata en cualquier momento. Pero el que quiera ponerle este mismo cartel al Barcelona también lo hace con argumentos. Los de Xavi son líderes de La Liga y, aunque no terminan de encontrar el juego que promete su entrenador, han demostrado ser un equipo fiable salvo por el batacazo en la Champions League.
[La alineación del Real Madrid para el partido ante el Barcelona de la Supercopa de España]
Las bajas del Madrid
Si hay algo que condiciona esta final desde antes de que arranque son las bajas a las que se enfrenta el Real Madrid. Ni siquiera se pudieron subir al avión David Alaba y Aurélien Tchouaméni, dos piezas indispensables para Carlo Ancelotti, pero tras las semifinales se han sumado nuevas víctimas por el camino.
Lucas Vázquez fue titular en las semifinales ante el Valencia, pero tuvo que ser sustituido en la segunda mitad por unas molestias. El gallego fue sometido a pruebas tras el partido y éstas arrojaron un diagnóstico nada favorable para sus intereses, un esguince de la sindesmosis peronea, algo que le tendrá un mes y medio alejado de los terrenos de juego.
Aquel encuentro dejó más consecuencias negativas en las figuras de Militao, Camavinga y hasta Fede Valverde. En el caso del central brasileño, fue golpeado duramente por un balón y abandonó el terreno de juego conmocionado, mientras que el centrocampista francés se llevó un golpe en la rodilla que le hizo dejar el choque dolorido. Valverde, por su parte, se llevó varios golpes sin demasiada importancia. Todos ellos, aunque tocados, llegarán a la final contra el Barcelona.
Así las cosas, no hay dudas de que Courtois estará en la portería, mientras que en la defensa habrá cambios. Carvajal y Mendy entrarán en los laterales, y Rüdiger y Militao se mantendrán como la pareja titular de centrales. En el centro del campo, Kroos repetirá como el ancla y Valverde como el pulmón a su lado, aunque Modric tiene todas las papeletas para entrar en el lugar que ocupó Camavinga en las semifinales. Arriba no habrá demasiados cambios, Vinicius, Rodrygo y Benzema parecen las fichas clave.
El reto de Carlo Ancelotti está en ir recuperando poco a poco la mejor versión de 'su' Real Madrid, aquel equipo que en los primeros compases de la temporada encandiló al mundo entero y parecía imparable. Ahora, antes incluso del parón por el Mundial, a los blancos les cuesta mucho más generar juego con fluidez y sacar los partidos adelante se ha convertido en una ardua tarea.
El Barça, a recuperarse
Cada partido del Fútbol Club Barcelona se ha convertido esta campaña en una verdadera incógnita. Es como lanzar una moneda al aire, nunca se sabe qué cara va a mostrar el equipo de Xavi Hernández, si la más brillante o la que, por el contrario, no se parece en nada al juego que sigue prometiendo su técnico.
[Xavi: "Psicológicamente, el Real Madrid tiene ventaja en la final"]
La realidad lo confirma. El Barça naufragó con estrépito en la Champions League al ser eliminado en la fase de grupos por segundo año consecutivo, pero en el otro lado de la balanza puede presumir de que es el líder de La Liga en su carrera precisamente con el Real Madrid. Dos versiones muy diferentes que parecen no atender a razones lógicas.
En esta Supercopa, los culés volvieron a dejar serias dudas en las semifinales ante el Real Betis y tan solo su acierto en la tanda de penaltis evitó un nuevo desastre. Xavi Hernández nota la presión. Es consciente de que llegó al Barça para ganar títulos y que, un tiempo considerable después de su desembarco en el banquillo, todavía todo sigue casi en pañales. Incluso el capitán Sergio Busquets confesó que cada vez pesa más todo el tiempo que ha transcurrido desde aquel último título de la Copa del Rey.
Se espera algún cambio también en el once inicial de Xavi, ya que Koundé podría pasar al lateral derecho y Christensen parece que entrará directamente al eje de la zaga. En el centro del campo, Sergio Busquets cuenta con muchas papeletas de recuperar su sitio, por lo que habrá que esperar para ver si el técnico catalán sacrifica a alguien del centro del campo como De Jong o, en su lugar, a uno de los tres futbolistas habituales de arriba.
En cualquier caso, dos equipos lejos de su mejor versión que pelean por el segundo título de la temporada. Quizás sea menor, seguramente los dos tienen objetivos mayores en lo que resta de curso, pero ninguno quiere dejar pasar la oportunidad de agrandar sus vitrinas y mucho menos perder ante el eterno rival.
Real Madrid - FC Barcelona
Real Madrid: Courtois; Carvajal, Militao, Rüdiger, Mendy; Kroos, Valverde, Modric; Rodrygo, Vinicius, Benzema.
FC Barcelona: Ter Stegen; Koundé, Christensen, Araújo, Alba; Busquets, Gavi, Pedri; Raphinha, Dembélé, Lewandowski.
Hora: 20:00 horas.
Estadio: King Fahd (Arabia Saudí).