Casi lo que menos importaba esta vez en el Santiago Bernabéu era lo que sucediera en el terreno de juego. El Real Madrid ya no se jugaba nada en La Liga y el Rayo Vallecano tenía opciones muy remotas de conseguir un puesto europeo, así que todas las miradas se centraban en lo que sucediera en torno a la figura de Vinicius.
Después del lamentable episodio racista sucedido en Mestalla con el brasileño como víctima una vez más, era un día para que el madridismo mostrara su apoyo a su futbolista y para que éste se sintiera querido por los suyos. Numerosos actos tanto antes como durante el partido a favor de Vinicius marcaron este choque que futbolísticamente desde luego que no pasará a la historia y en el que el Real Madrid salvó los muebles a última hora gracias a un gol de Rodrygo.
A punto estuvo el Rayo Vallecano de salvar al menos un punto de su visita al Bernabéu ante un Madrid distraído, pero la calidad de los blancos se impuso casi sin querer una vez más. Raúl de Tomás hizo soñar a los de la franja con su segundo tanto de la temporada en un momento de lo más oportuno, pero Rodrygo quería dedicarle un gol a su amigo Vinicius, así que en el minuto 89 celebró con el puño cerrado en alto de forma reivindicativa.
Un partido sin tensión
El final de temporada va a ser duro para el Real Madrid. Jugar sin tener nada en disputa no es nada sencillo. No llega la motivación, no hay ánimo y cuesta mucho más de lo normal meter la pierna en cada jugada. Sin embargo, algo diferente envolvía este choque para el conjunto blanco después de todo lo que había sucedido con Vinicius en Mestalla, así que quería dedicarle la victoria.
Pese a todo, el Rayo estuvo cómodo en los primeros minutos de encuentro. Le faltó, no obstante, algo más de malicia de cara a la portería defendida por Courtois porque un tiro ajustado de Isi ante el que actuó el guardameta belga y un lanzamiento de Óscar Valentín fueron de lo poco reseñable.
Rodrygo hizo daño por la izquierda, precisamente ese lugar por el que Vinicius suele entrar en las defensas rivales como cuchillo en mantequilla, aunque quien iba a empezar a desequilibrar las cosas era otro. Karim Benzema, jugando cojo, se asoció con Valverde y, tras regatear a Dimitrievski, anotó el primer tanto del partido.
Con esta pequeña ventaja llegó el equipo de Carlo Ancelotti al descanso. Estaba siendo un partido de sudar poco, de no meter la pierna demasiado, y casi de pensar ya en la temporada que viene. Pero si la primera parte tuvo poca intensidad lo de la segunda fue todavía peor. Los blancos manejaron el balón sin profundidad y el Rayo esperó porque tampoco sufría.
Carvajal rozó el segundo para los locales, pero se notaba que Vinicius no estaba en el terreno de juego y una ausencia como la suya siempre se nota. Pese a todo, el tramo final sí que tuvo mucho más vértigo. En los últimos minutos pasaron todas las cosas que no habían sucedido antes.
Raúl de Tomás confirmó su resurrección con su segundo gol de la temporada (vaya escenario para hacerlo) e hizo soñar al Rayo incluso con algo más que un empate. Las opciones de Europa eran remotas, pero ahí estaban. Sin embargo, a los de Iraola les duró muy poco la ilusión. Rodrygo, con un disparo sutil desde la frontal del área, volvió a poner en ventaja al Real Madrid y celebró con su puño en alto apoyando a Vinicius.
Un triunfo para el equipo de Ancelotti que, al menos, le sirve para demostrar que no se va a dejar ir del todo en este tramo final de la temporada en el que ya no se juega nada en La Liga más allá del segundo puesto.
Real Madrid 2 - 1 Rayo Vallecano
Real Madrid: Courtois, Carvajal, Alaba, Rüdiger (Tchouaméni, m.83), Nacho; Camavinga, Kroos, Modric (Marco Asensio, m.71); Fede Valverde (Ceballos, m.63), Rodrygo y Benzema.
Rayo Vallecano: Dimitrievski; Balliu, Catena, Lejeune, Fran García; Santi Comesaña (Trejo, m.63), Valentín; Isi (Chavarría, m.63), Unai López (Salvi, m.83), Álvaro García (Falcao, m.83); y Camello (De Tomás, m.69).
Goles: 1-0, m.31: Benzema. 1-1, m.84: De Tomás. 2-1, m.89: Rodrygo.
Árbitro: Jesús Gil Manzano (Comité extremeño). Amonestó a Carvajal (60) por el Real Madrid; y a Álvaro García (32), Unai (51) y Comesaña (53) por el Rayo.
Incidencias: encuentro correspondiente a la trigésimo sexta jornada de LaLiga, disputado en el estadio Santiago Bernabéu ante 45.811 espectadores. Los dos equipos posaron entremezclados con una pancarta contra el racismo y toda la plantilla del Real Madrid posó con la camiseta de Vinícius en un gesto de apoyo al brasileño.