El Real Madrid volvió este domingo a los entrenamientos después de unos días de descanso tras la gira por Estados Unidos. Los blancos se ejercitaron en Valdebebas con la mira puesta en el debut liguero ante el Athletic. 

El estreno de la temporada 23-24 será el próximo sábado 12 de agosto a las 21:30. El Real Madrid se medirá en San Mamés al Athletic Club en el que será el inicio por conquistar la trigesimosexta liga de su historia.

El de Bilbao será el primero de los tres encuentros que disputarán los hombres de Carlo Ancelotti fuera de su feudo. El 19 de agosto viajarán a Almería (19:30) y el 25 se desplazarán hasta Vigo para enfrentarse al Celta. 

No será hasta el próximo fin de semana del 2 y 3 de septiembre el momento el que el Real Madrid volverá a jugar en el césped del Santiago Bernabéu. Será en el derbi madrileño ante el Getafe, justo antes del primer parón por selecciones de la temporada.

Durante los próximos días, Ancelotti podrá contar con prácticamente toda su plantilla. Ferland Mendy está totalmente descartado ya que se encuentra en su proceso de recuperación después de caer lesionado en el amistoso ante el Barça. Además, está la incógnita de Güler. A priori estará ausente durante la próxima semana, pero no se puede descartar su vuelta al césped antes de lo previsto.

Tiempo de ajustes

El estreno en la competición doméstica ante el Athletic es muy exigente. San Mamés, uno de los campos más difíciles de España, será una caldera. Será un partido importante ya que vencer en un feudo tan complicado y arrancar con un buen sabor de boca puede subir la moral a la plantilla.

El Real Madrid deberá ofrecer una mejor imagen que la exhibida durante la pretemporada en Estados Unidos. Una gira que comenzó con buen pie, pero que ha desencadenando en dos derrotas consecutivas.

Los primeros compromisos ante el Milan y el Manchester United fueron muy positivos. El Madrid mostró su pegada, Vinicius estuvo acertado y sobresalió la figura de Jude Bellingham. Los blancos anotaron 5 tantos y recibieron 2.

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Sin embargo, el final de la gira dejó un sabor agridulce con las derrotas frente al Barcelona y al Manchester United. En el Clásico la mala suerte se cebó con el Real Madrid. Los blancos remataron cinco veces a la madera y acabaron perdiendo 3-0. Un resultado que no reflejó en absoluto lo visto sobre el terreno de juego.

En el último partido ante la Juventus los hombres de Ancelotti acusaron la poca intensidad en defensa y encajaron tres goles. De nuevo, Vinicius fue el más destacado del lado madridista, pero su actuación no sirvió para evitar la derrota.

Esta semana toca cambiar el chip y preparar bien el debut ante el Athletic Club. Un partido que no será nada fácil.