El Real Madrid se dejó dos puntos ante el Sevilla en el Sánchez Pizjuán. El conjunto blanco, que lo intentó de todas las maneras, no pudo hacerse con el triunfo tras un polémico arbitraje de De Burgos Bengoetxea que anuló dos tantos al conjunto blanco y no señaló un posible penalti sobre Vinicius. Sin embargo, a los de Ancelotti les toca pasar página y centrarse en una semana muy importante de la temporada.
Los blancos comenzarán la semana con el encuentro de Champions League ante el Braga en Portugal. Unos días después viajarán a Barcelona para medirse al Barcelona en un Clásico que puede dejar un nuevo líder en La Liga. Dos citas que llegan tras este tropiezo, pero del que el Real Madrid puede sacar noticias positivas.
La primera de ellas es la competitividad. El conjunto de Carlo Ancelotti disputó en el Ramón Sánchez Pizjuán un encuentro notable en el que igualó e incluso superó en varias ocasiones al Sevilla en intensidad. Esa era una de las claves que Ancelotti advirtió de que su equipo quería mejorar. Y así fue.
[El Real Madrid se deja dos puntos en el Sánchez Pizjuán tras una polémica actuación arbitral]
Algo que está relacionado con la forma de entrar a los partidos. A lo largo de este inicio de curso, el Real Madrid había sufrido mucho en los compases iniciales de los partidos. En cantidad de ellos ha comenzado perdiendo lo que le ponía en una situación de aprieto. En casi todas las ocasiones solventó las papeletas, pero por ejemplo sucumbió en el derbi ante el Atlético de Madrid. Esta vez, ante el Sevilla, el Real Madrid salió con otra actitud. Marcó dos goles en los primeros diez minutos, pero ambos fueron anulados por De Burgos Bengoetxea.
Solidez defensiva
Ante el Sevilla el Real Madrid se mostró por fin fiable en defensa. Tuvo la mala suerte de encajar ese gol que fue de Alaba en propia puerta. Una acción de infortunio que le acabó costando dos puntos a los blancos. Sin embargo, durante los 90 minutos el Real Madrid apenas sufrió. Dejó atrás los problemas defensivos de partidos anteriores y se vio una pareja Rudiger-Alaba que parece que cada vez se entiende mejor.
Esta semana la solidez defensiva será clave. Quizá no tanto ante el Braga en Champions ya que a priori es un equipo inferior que no debería ponerle en apuros al Real Madrid. Pero ante el Barça si hará falta atención defensiva y ser un bloque sólido. El Clásico es un partido único en el que da igual las dinámicas de los equipos. Es un duelo especial en el que los blancos deberán mostrar su mejor versión.
Es cierto que el Real Madrid tuvo mala suerte con las lesiones de Courtois y Militao, pero poco a poco está empezando a confeccionar su defensa. Carvajal, que ha comenzado como un tiro la temporada, es fijo en el once. Lo mismo ocurre con Rudiger y Alaba. La duda está en el lateral izquierdo, pero ahí 'Carletto' tiene opciones muy variadas. Cuenta con un jugador sólido en defensa como Mendy, con un lateral ofensivo como Fran García y con un todoterreno como Camavinga.
La vuelta de Vinicius
Sin duda, otra de las noticias positivas que saca el Real Madrid del Sánchez Pizjuán y de cara a esta semana de altos vuelos es la presencia de Vinicius. El brasileño no hizo un encuentro espectacular ante el Sevilla, pero dejó muestras de su calidad y se apreció que su nivel está subiendo con el paso de los partidos.
Físicamente está mejor, se atreve a realizar más regates, más arrancadas, más esfuerzos... Está volviendo a ser el Vini más determinante. Y eso es una magnífica noticia para el Real Madrid. Su presencia y su conexión con Bellingham puede significar un aumento de nivel notorio en el juego del equipo. Además, libera más a un Rodrygo al que le está costando en este inicio de temporada.
Vinicius será clave ante el Braga y frente al Barça, especialmente contra el cuadro culé. Será una pesadilla para la zaga rival y podrá abrir huecos que sus compañeros puedan aprovechar.