La Liga 2023/2024 llega a su cenit. 19 jornadas han transcurrido, 190 partidos jugados en total. Y eso deja un panorama con dos equipos adelantados en la carrera por el título: Real Madrid y Girona. Ambos cierran la primera vuelta empatados a puntos (48), con los blancos como campeones de invierno.
Una situación inesperada por la capacidad del Girona de igualar fuerzas con los grandes de La Liga. Tanto el Madrid como el conjunto dirigido por Míchel sacan ya una amplia ventaja a los otros dos teóricos contendientes al título: FC Barcelona (a 7) y Atlético de Madrid (a 10). Aunque es pronto para descartar a azulgranas y rojiblancos, este campeonato tiene pinta de una Liga a dos.
Es más, con esta puntuación de Madrid y Girona, ambos estarían en una previsión que les colocaría cerca de los 100 puntos. Sólo ha habido dos campeones en la historia que alcanzaron la centena de puntos: el Real Madrid de José Mourinho en el 2012, firmando también 121 goles, y al año siguiente lo igualó el Barça de Tito Vilanova.
El muro del Real Madrid
El Real Madrid ha cerrado la primera vuelta con el 'título' de campeón de invierno. Pese a estar empatado a puntos con el Girona, el goal average favorable -tanto por haber ganado en Montilivi por 0-3 como por su mejor diferencia de goles (+29 y +22)- le da el liderato a la conclusión de la jornada 19.
Los blancos únicamente han perdido un partido, ante el Atlético de Madrid en el Metropolitano (3-1). Ha empatado tres: 1-1 ante el Sevilla, 0-0 ante el Rayo Vallecano y 1-1 ante el Betis. San Mamés, Sánchez Pizjuán y Montjuïc son otros de los tres escenarios difíciles en los que ha ganado esta temporada.
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El dato más relevante del equipo que dirige Carlo Ancelotti es que solo ha encajado 11 goles en la primera vuelta. Se trata de la mejor cifra del club en sus primeras 19 jornadas de La Liga, igualando un registro que ya consiguió en la temporada 1961/1962. Es decir, hacía más de 60 años que el Real Madrid no protegía tan bien su portería.
Y eso, a pesar de tener las bajas de Courtois y Militao, dos piezas básicas en ese sistema defensivo del conjunto blanco que se rompieron el cruzado a comienzos de temporada. Y es que las lesiones han sido una constante en la primera vuelta de un Real Madrid que ha visto como, además de Courtois y Militao, se han perdido varios partidos por lesión Kepa, Carvajal, Alaba -tercer jugador en romperse el cruzado-, Mendy, Vinicius, Arda Güler, Tchouaméni y Camavinga.
El protagonismo recae sobre Jude Bellingham, pichichi tras la primera vuelta con 13 goles -uno más que Morata y Borja Mayoral, que le persiguen con 12 cada uno-. Un goleador inesperado, casi tanto como el valor que ha tomado el juego a balón parado para el equipo blanco en lo que va de temporada.
Dos saques de esquina en el tramo final de sus partidos, el primero en el añadido, en victoria, frente el Alavés, firmado por Lucas Vázquez en la última jornada del año, y el otro en el Bernabéu, contra el Mallorca, firmado por Antonio Rüdiger a diez minutos del cierre, propiciaron la victoria del Real Madrid y su permanencia en el ático de la clasificación.
El Madrid es el equipo con más goles anotados de córner (7). El gol de Rüdiger salvó al Real Madrid de su ya clásico tropiezo de enero ante un Mallorca frenado por la madera en dos ocasiones, que desfiguró al líder en gran parte del partido.
Avisado el Real Madrid y Ancelotti de los peligrosos arranques de año, de la dificultad de reengancharse con ritmo a la competición tras las vacaciones, la consecución del campeonato de invierno liguero demandó un esfuerzo extra y sufrimiento este miércoles
"En este primer tramo de la temporada hemos marcado muchos goles a balón parado. Mi cuerpo técnico lo está trabajando muy bien. La verdad es que tenemos buenos lanzadores y rematadores formidables como Rüdiger. En partidos como el de hoy, el balón parado te puede dar ventaja ante un equipo que ha defendido bien, muy fuerte en los duelos. Nosotros no hemos jugado a nuestro mejor nivel, nos ha faltado frescura y acierto en el último tercio", reconoció Ancelotti.
El aspirante del siglo
El Girona, con sus 48 puntos, ha logrado la mejor puntuación del siglo XXI en una primera vuelta de La Liga excluyendo a Madrid, Barça y Atlético de Madrid -los tres equipos que se reparten el título desde hace 19 años-.
Su única derrota fue contra el Real Madrid, en aquel 1-3 en Montilivi. Como los blancos, ha empatado otros tres partidos: 1-1 ante la Real Sociedad, 1-1 ante el Athletic y 1-1 ante el Betis. El Sánchez Pizjuán, Montjuïc y El Sadar son los escenarios complicados en los que ya ha sobrevivido el equipo rojiblanco.
El Girona ha cerrado la primera mitad de LaLiga con 24 goles en contra y 46 goles a favor en 19 partidos: más de 2,4 por partido y seis más que el Madrid, siete más que el propio Atlético y 11 más que el Barcelona. Su máximo goleador es el ucraniano Dovbyk, con 11 goles (dos menos que Bellingham).
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Los de Míchel suman un tanto más que el Manchester City con los mismos partidos. De las cinco grandes ligas europeas solo mejoran su producción goleadora el Bayern Múnich, con 49 goles en 15 partidos, y el Bayer Leverkusen de Xabi Alonso, con 46 en 16. El Girona solo se ha quedado sin ver puerta en un partido, justo en la única derrota del curso: el 30 de septiembre por 0-3 ante el Madrid.
Desde entonces, invicto, ha conseguido 29 puntos de 32 posibles y ha finalizado la primera vuelta con 48 de 57, 27 más que la temporada pasada: es, de largo, el equipo que más mejora su puntuación respecto a la temporada pasada, muy por delante del Athletic (12) y el Getafe (9).
Y además está a un solo paso de igualar los 49 puntos de la última Liga, en la que ya peleó por jugar en Europa hasta la última jornada, y a tres de su máximo en Primera División: los 51 puntos con Pablo Machín en la 2017/2018. El mínimo, los 37 de la 2018/2019 (Eusebio Sacristán), quedaron atrás hace días.
Con el triunfo ante el Atlético, el equipo de Míchel también superó su récord de triunfos en Primera con 15: uno más que en la 2017/2018 todavía con media competición por jugar. En Girona se han ganado el derecho de soñar, aunque pelear de tú a tú con el Madrid será un reto mayúsculo.