Este verano se avecina como un culebrón en torno al futuro de Cristiano Ronaldo. El atacante portugués dio a entender al terminar la final de la Champions League -en la que el Real Madrid se impuso al Liverpool por 3-1 con gol de Karim Benzema y doblete de Gareth Bale- que su etapa como madridista había acabado. Desde entonces, se ha generado una especie de pulso entre el club blanco y el jugador.

Cristiano pide más reconocimiento, que a su vez vendría traducido en una mejora salarial. El conjunto merengue, por su parte, no cederá a unas demandas desmedidas, y pese a que quiere mantener al que ha sido su jugador franquicia durante nueve temporadas, tampoco pondría muchas trabas a su salida, pues el precio a pagar por él es el mejor espantador.

Con una cláusula de rescisión tasada en mil millones de euros, pocos clubes del mundo, por no decir ninguno, podrían permitirse un fichaje de tales proporciones. En caso de que Cristiano finalmente se marche, el Madrid ingresaría una importante cantidad de millones en sus arcas, un motivo añadido -además del propio orgullo y sentido común- para que el club no ceda ante cualquier exigencia.

LAS PALABRAS DE JOSÉ DAMIÁN GONZÁLEZ

Así lo explicó José Damián González en el programa televisivo El Chiringuito. El periodista guarromanense definió la situación como un pulso entre futbolista y entidad, del cual solo ve un perdedor pase lo que pase, Cristiano. "El pulso lo va a perder Cristiano se vaya o se quede".

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