Ver para creer. Durante la disputa del clásico de Tanzania entre el Simba y el Young Africans, dos hombres no tuvieron mejor idea que jugarse a sus respectivas mujeres, un acuerdo que quedó firmado bajo contrato por si la ocurrencia no fuese aún lo suficiente rocambolesca. El partido de fútbol lo ganó el Simba por 2-1, y el perdedor intentó salvarse con una compensación económica y librarse de que su esposa pasara una noche con su rival, como así estipulaba la apuesta.
Por increíble que parezca, este no es un hecho aislado, según Osasu Obayiuwana, corresponsal de la BBC en África, varios aficionados han perdido a sus parejas en Tanzania debido a este tipo de apuestas. El suceso ha llegado incluso a los oídos de la la FIFA, que está investigando lo ocurrido.