La mayoría silenciosa se echa a las calles de Barcelona defendiendo la unidad de España
Cientos de miles de personas se han manifestado este domingo a mediodía en el centro de Barcelona por la unidad de España y contra la independencia de Cataluña, convocados por Societat Civil Catalana (SCC): más de un millón según la entidad y 350.000 según el Ayuntamiento.
Con el lema 'Recuperem el seny', han marchado exhibiendo multitud de banderas españolas y catalanas --además de algunas europeas-- desde la plaza Urquinaona, pasando por la Via Laietana hasta la avenida Marquès de l'Argentera, donde se han pronunciado los discursos.
Ha transcurrido en un ambiente reivindicativo en el que se han proferido constantes cánticos pidiendo cárcel para el presidente de la Generalitat: 'Puigdemont a prisión', entre otras consignas.
Tan constante ha sido este clamor que el expresidente del Parlamento Europeo Josep Borrell, ha llamado en su discurso a los manifestantes a no hacerlo: "A prisión va solo el que dice el juez que tiene que ir".
Los manifestantes, algunos de los cuales se han desplazado hasta Barcelona desde otros puntos de España y con nutrida representación política, han comenzado a caminar puntuales a las 12 y han tardado casi dos horas en completar el recorrido, ya que la cabecera no ha llegado hasta el punto de encuentro, ante la Estació de França, hasta las 13.50.
La manifestación ha discurrido sin incidentes y ha terminado con los discursos de Borrell y del Premio Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa ante la estación, donde se ha leído el manifiesto que ha cerrado el acto y que ha pedido tender puentes para resolver la situación política, y ha pedido que se les tenga en cuenta: "Sin nosotros no hay solución".
Políticos en primera fila
En las primeras filas de la manifestación se han situado la ministra de Sanidad, la catalana Dolors Montserrat; la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, y el delegado del Gobierno en Cataluña, Enric Millo, como principales autoridades, a las que se han sumado varios representantes del PP, Cs y PSC.
Así, han representado a los populares, entre otros, el presidente del partido en Catalunya, Xavier García Albiol; el vicesecretario de Autonomías, Javier Arenas; la vicesecretaria de Estudios, Andrea Levy, y el vicesecretario de Comunicación, Pablo Casado.
Por parte de Cs, las caras más visibles han sido las de su presidente, Albert Rivera, y la de su líder en Cataluña, Inés Arrimadas, a quienes han acompañado los portavoces en el Congreso y en el Parlament, Javier Villegas y Carlos Carrizosa, entre otros.
Los socialistas catalanes no participaban como partido pero sí llamaron a ir, y se ha podido ver al secretario de Organización y portavoz del PSC, Salvador Illa, y al secretario segundo de la Mesa del Parlament, David Pérez, en la cabecera, además del exministro Celestino Corbacho.
También han acudido el exfiscal Carlos Jiménez Villarejo; el presidente de la Cámara de España y de Freixenet, Josep Lluís Bonet; el presidente de Naturhouse, Félix Revuelta, y miembros de una veintena de entidades.
"No somos fachas, somos españoles
Uno de los temores de la organización era que la extrema derecha tuviera visibilidad durante la marcha, pero los propios manifestantes han rechazado que se exhibieran símbolos franquistas o vinculados con la extrema derecha: "Esa bandera no nos representa", han gritado al paso de algunos de ellos (éstos han sido parte de los concentrados, antes de esta manifestación, ante el Cuartel de la Guardia Civil en Travessera de Gràcia, en apoyo a la Benemérita).
Discursos de Vargas Llosa y Josep Borrell
El escritor y Premio Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa ha asegurado que la democracia española "está aquí para quedarse, y ninguna conjura independentista la destruirá".
En su discurso al acabar la manifestación ha advertido de que el nacionalismo "ha llenado la historia de Europa, del mundo y de España de guerra, sangre y cadáveres".
Por su parte, el expresidente del Parlamento Europeo Josep Borrell ha criticado a las empresas que anuncian su cambio de domicilio social fuera de Cataluña ahora que temen una declaración de independencia: "¿No lo podíais haber dicho antes?".
"Todo lo que dijísteis en privado ¿por qué no lo decíais en público?", les ha preguntado durante su discurso.
Para el también exministro socialista, "si lo hubiesen dicho, quizá no estaría pasando" lo que está pasando ahora en Cataluña, y ha constatado que los empresarios en general sólo han opinado abiertamente en privado durante el proceso soberanista.