Agentes del Grupo Operativo de Intervención Rápida (GOIR) la Policía Local de Alicante han salvado la vida de un hombre de 38 años al que practicaron un torniquete cuando se estaba desangrando por cortarse la arteria del brazo en un accidente con una radial.
Los hechos ocurrieron el pasado viernes alrededor de las 19 horas, cuando la víctima realizaba unas obras de rehabilitación en su vivienda en el barrio Virgen del Remedio y se cortó la arteria del brazo con una radial, ha explicado el Ayuntamiento en un comunicado. La "decisiva y rápida" intervención policial logró evitar que se desangrara, ha destacado el Ayuntamiento en un comunicado.
Los efectivos recibieron la alerta del 112 para intervenir en un suceso con un herido en una vivienda. La Policía, ante la gravedad de la emergencia, solicitó la intervención urgente del GOIR que se encontraba patrullando en Alicante, y de inmediato se personaron siete agentes y un oficial.
Los vecinos del herido informaron a los agentes del GOIR que la víctima se encontraba en el zaguán de la primera planta, se estaba desangrando y que habían intentado taponarle la herida sin lograrlo. El herido estaba tumbado sobre un charco de sangre, presentaba una herida en el brazo izquierdo muy profunda y estaba muy nervioso.
Intervención por equipos
Los efectivos se dividieron en varios equipos para intervenir rápido y lograr salvarle la vida. Dos agentes se centraron en estabilizar al herido, tranquilizarle y ponerlo en posición lateral, mientras otros agentes verificaban las heridas.
Otro policía volvió a comisionar un Samu de urgencia y otro equipo subió al inmueble para verificar el origen de las lesiones. El GOIR accedió a la vivienda y descartó la preencia de una tercera persona en el interior. Vio que la casa estaba en obras y encontró sacos de cemento, escombros azulejos y una radial.
De forma paralela, el equipo del GOIR que estaba con el herido consiguió tranquilizarlo para que no perdiera la conciencia, pero estaba muy débil y desvaneciéndose, ya que había perdido más de un litro de sangre. Presentaba riesgo de fallecimiento por shock hipovolémico, por lo que dos agentes lograron taponar la herida e intervinieron de forma rápida y segura colocando un torniquete en la altura superior del brazo afectado, decisivo para salvarle la vida.
El hombre, consciente en todo momento de la gravedad de la situación, presentaba dos heridas inciso contusas, una a la altura del antebrazo y la otra en el bíceps, y se había seccionado la arteria con la radial, herida que podría haberle ocasionado el fallecimiento si los agentes no hubieran conseguido taponarla. Cuando llegaron los servicios sanitarios intervinieron rápidamente y lo trasladaron de urgencia al Hospital General.
Visita de los agentes al herido
Al día siguiente, los policías se interesaron por el estado del herido y lo visitaron en el centro sanitario, donde comprobaron que estaba ingresado y estable tras ser sometido a una intervención quirúrgica de reconstrucción de la masa muscular y del brazo.
Por su parte, los servicios médicos dieron la enhorabuena a los agentes policiales y destacaron que de no haber taponado la herida con el torniquete, el hombre habría fallecido.