La Policía Nacional ha lanzado una operación este miércoles para desactivar los planes de un yihadista del Estado Islámico o ISIS que planeaba cometer una masacre en Sevilla.

Según adelanta en primicia El Confidencial citando fuentes de la lucha antiterrorista, el terrorista estaba preparado para atentar de forma inminente contra las procesiones de Semana Santa que recorren estos días las principales calles de la capital hispalense congregando a miles de personas.

El sospechoso, Zouhair El Bouhdidi, de 23 años, estaba estudiando en la Universidad de Sevilla. Ha sido arrestado en Marruecos, su país de origen, en una operación conjunta con la policía de Rabat y gracias a la información facilitada desde Madrid. Las pesquisas apuntan a que el individuo había decidido hacer un viaje relámpago para despedirse de su familia, tras su decisión de inmolarse en el ataque. Las fuentes consultadas subrayan la peligrosidad del terrorista y su firme determinación para llevar a cabo el ataque. El propio detenido habría admitido ya a las autoridades marroquíes su intención de cometer un atentado suicida.

Los expertos de la Policía Nacional en la lucha contra el terrorismo yihadista llevaban semanas siguiendo sus pasos. El operativo en España se ha centrado en el análisis de sus relaciones personales para tratar de confirmar que no había recibido el apoyo de otras estructuras ni tampoco contaba con colaboradores. En estos momentos, los agentes están registrando su vivienda, en la propia ciudad de Sevilla, en busca de nuevas pruebas sobre sus planes.

El Confidencial informa de que el detenido pretendía provocar una matanza con un explosivo de fabricación casera, el TATP o triperóxido de triacetona, también conocido como la madre de Satán. Se trata del material más utilizado por el Estado Islámico por su facilidad para elaborarlo con simples productos de perfumería. Esa fue la sustancia que elaboraron los terroristas de Barcelona y la misma que usó también la célula de los atentados de París de noviembre de 2015, por ejemplo.

Las pesquisas, en las que también ha participado el Centro Nacional de Inteligencia (CNI), apuntan a que el yihadista tenía previsto atentar en las procesiones de Sevilla de este mismo miércoles, a solo 11 días de las elecciones generales, aunque no se descarta finalmente hubiera optado por otra fecha. El detenido conoce bien la capital hispalense. Reside en la ciudad al menos desde 2016.

Vecinos del presunto yihadista arrestado en Marruecos, cuya vivienda correspondiente al número 88 de la calle Ortega y Gasset, en el barrio sevillano de la Carretera Su Eminencia, ha sido registrada por efectivos de la Policía Nacional, han destacado que actuaba de forma "normal". Asimismo, una amiga de la familia del activista ha indicado que éste fue a Marruecos para ver su abuela.

En declaraciones a Europa Press, varios vecinos han señalado que el detenido es "un chaval normal y corriente" que "iba a su bola" y que se le veía habitualmente aparcando su coche y saludando cordialmente a la gente desde "los casi tres años que lleva viviendo aquí".

De otra parte, una amiga de la familia ha indicado que el detenido vive en esa vivienda con sus padres y sus hermanos y que ahora mismo se encuentran en Rabat (Marruecos) para "visitar a su abuela" que habría sido afectada de una dolencia cardiaca.

Asimismo, la amiga de la familia ha señalado que el detenido y su familia "son buenas personas" y que si ella se hubiera enterado de que el detenido tenía relación con el yihadismo, "sería la primera en avisar a la Policía".