La Comunidad de Madrid pondrá en marcha en enero un proyecto piloto para que las mujeres y los menores que viajan en los autobuses nocturnos puedan solicitar bajarse fuera de las paradas del itinerario, "con objeto de acortar su recorrido y por tanto proporcionarles una mayor seguridad".
Así lo ha avanzado, en una entrevista con Europa Press, el consejero de Transportes, Movilidad e Infraestructuras de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, quien ha precisado que esta medida se pondrá en marcha en Fuenlabrada, Leganés, Pinto, Valdemoro y Las Rozas, "como prueba piloto durante unos meses".
"Solamente se requerirá que la persona lo solicite al conductor una parada antes de llegar a su destino; que se sitúe en la zona de la puerta delantera, porque descenderá por esta puerta, y que las paradas sean, lógicamente, en tramo urbano, para poder encontrar un sitio seguro para poder detener el vehículo", ha explicado Garrido.
Según ha explicado, se trata de una experiencia piloto y pionera pero la idea es extenderlo a otros municipios de la región. "Es una medida pionera en la Comunidad de Madrid de la que estamos muy orgullosos", ha manifestado el consejero, quien ha defendido esta prevención de "discriminación positiva a favor de aquellos grupos de personas que están siendo objeto de un mayor número, desgraciadamente, de incidentes violentos".
A este respecto, ha aseverado que "son claramente mayores víctimas de la violencia las mujeres y también los niños, no los hombres".
"Lo que pretendemos es que tanto las mujeres como los menores que viajen en nuestros autobuses nocturnos de toda la red de transporte público de la Comunidad puedan solicitar la parada a demanda fuera de las paradas que ya están previstas", ha aseverado.
Para ello, en enero, previsiblemente después de las fiestas navideñas, se pondrá en marcha esta experiencia piloto en algunos municipios para ver "cuál es la mecánica más adecuada para que sea utilizada".