Circulaba con una bici en plena cuarentena del coronavirus por un camino rural. Y además borracho.
Agentes de la Guardia Civil del barrio rural de Casetas de la capital aragonesa han auxiliado a un ciclista que había sufrido un accidente, en un camino del término municipal de Mallén.
Según ha informado la Benemérita, los efectivos se encontraban prestando servicio en la comarca del Jalón cuando recibieron un aviso del 062 que alertaba de un ciclista accidentado en el citado municipio zaragozano.
Una vez en el lugar, los guardias civiles observaron una bicicleta tirada en un camino y escucharon a una persona que se lamentaba de dolor desde una acequia. Tras su localización, se verificó que este hombre se hallaba parcialmente cubierto de agua y barro y con síntomas de embriaguez e hipotermia, debido a las bajas temperaturas.
Los agentes extrajeron al accidentado de la acequia, lo protegieron con mantas térmicas y llamaron a una ambulancia para que trasladase al ciclista al Hospital de Zaragoza.
Sin embargo, veinte minutos después de iniciarse el recorrido, el personal de la ambulancia solicitó la presencia policial ya que el accidentado se negaba a permanecer en el vehículo, soltándose incluso de las medidas de seguridad de la camilla e intentando descender del habitáculo.
Los agentes se personaron en el lugar y verificaron que esta persona no presentaba muestra de dolor o limitación para moverse, determinándose la anulación del traslado al centro hospitalario. Además, ante el estado de embriaguez que presentaba el varón y por hallarse a varios kilómetros de su domicilio, la Guardia Civil procedió a trasladarlo hasta su vivienda para evitar el riesgo que suponía que volviese andando tanto para él como para otros usuarios de la vía.
Por último, los agentes interpusieron una denuncia administrativa a este hombre, de 57 años, por incumplir las medidas de confinamiento establecidas en el Real Decreto con motivo del estado de alarma por la pandemia del coronavirus.