La ministra de Educación y Formación Profesional, Isabel Celaá, ha explicado que su departamento estudia segregar espacios por edades en los centros educativos para "no mezclar mucho las diferentes etapas" durante el próximo curso y así poder "perimetrar" posibles rebrotes de coronavirus en las escuelas.
En una comparecencia en la Comisión de Educación y Formación Profesional del Senado, Celaá ha subrayado este jueves que tanto su Ministerio como las comunidades autónomas preparan una 'vuelta al cole' en septiembre "pensando en absolutamente todas las posibilidades" en las que puede evolucionar la pandemia, que el pasado mes de marzo suspendió las clases presenciales en toda España.
La ministra ha anunciado que la próxima semana se volverá a reunir con los consejeros autonómicos de Educación en la Conferencia Sectorial para avanzar en las medidas sanitarias que habrá que implantar en los centros educativos el próximo curso para evitar contagios. "Porque es un motivo sanitario y no educativo", ha dicho Celaá, que después ha enfatizado este mensaje: "La educación no está en crisis de ninguna de las maneras, tenemos una crisis sanitaria".
En ese sentido, y tras las preguntas de los grupos parlamentarios sobre cómo se tendrán que adaptar los centros educativos para retomar la enseñanza presencial, Celaá ha adelantado que se utilizarán "todos los espacios" de los centros educativos para favorecer el distanciamiento entre el alumnado, incluso la separación física por edades.
"Tendremos que observar cuestiones como la compartimentación y no mezclar mucho las etapas por si se produce un brote y es preciso perimetrar el lugar del brote", ha detallado la ministra, que el pasado lunes se reunió con el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, para "preparar el próximo curso en las mejores condiciones de seguridad".
"El desarrollo del curso 2020-2021 es imprevisible"
El Ministerio de Educación y las comunidades autónomas han formado un grupo de trabajo para coordinar estas medidas para adaptar la enseñanza a la evolución del coronavirus. Entre ellas, la provisión de suficientes dispositivos electrónicos para garantizar "el acceso de todo el alumnado" a la educación online en el caso de que se produzca un repunte de contagios que obligue a confinar de nuevo a la población en sus domicilios.
Así figura en un borrador del Ministerio, al que ha tenido acceso Europa Press, con las orientaciones para la preparación de planes de contingencia para el curso 2020-2021. El documento señala que los centros tendrán que proveer a sus estudiantes de estos dispositivos mediante "entrega o préstamo" para evitar la 'brecha digital' en los hogares sin conexión a Internet y ordenadores.
"El desarrollo del curso 2020-2021 es imprevisible, dado el desconocimiento que aún tenemos acerca de la posible evolución de la pandemia del Covid-19. En consecuencia, resulta imprescindible establecer planes de contingencia que prevean las distintas circunstancias que puedan darse", se lee en este borrador elaborado por la Secretaría de Estado de Educación.
Todos los centros educativos contarán con planes de contingencia ante una eventual suspensión de la actividad docente presencial, y esos planes deben estar definidos antes de las próximas vacaciones escolares. "Por lo tanto, esa será una tarea prioritaria para desarrollar en este próximo periodo de actividad escolar previo a la finalización del curso", indica el documento.
Para elaborar esos planes de contingencia, el Ministerio enumera una serie de recomendaciones a la hora de adaptar la vida en los centros a las medidas necesarias para prevenir contagios. Entre ellas, la provisión de material higiénico y sanitario, mantener las distancias de seguridad con limitación de aforos en aulas y otros espacios como patios y zonas comunes.
El Ministerio recomienda también crear protocolos de movilidad para el acceso y la salida de los centros, y adecuar los horarios "para cumplir las condiciones sanitarias establecidas" con el "establecimiento de turnos" entre los estudiantes.