La OMS apunta a los espacios cerrados como principal foco y da por buenos los datos de fallecidos en España
La directora de Salud Pública de la Organización Mundial de la Salud (OMS), María Neira, ha avisado de que los lugares cerrados fueron los escenarios que más contribuyeron a la transmisión del nuevo coronavirus, tanto en España como en otros países.
Además, Neira ha avisado, en una entrevista en el Canal 24 Horas de TVE, recogida por Europa Press, de que "nunca" se va a saber qué acto en concreto contribuyó al contagio masivo del nuevo coronavirus, negando así que la manifestación del 8M fuera el principal foco de transmisión de la enfermedad.
"Nunca sabremos qué proporción de contribución a la transmisión de la epidemia tuvo un acto concreto. Lo que sí sabemos es que ese día en España se estaban moviendo millones de personas, se estaba yendo a cines, teatros, terrazas, partidos de fútbol y eventos de todo tipo", ha comentado la dirigente de la OMS.
En este sentido, Neira ha reiterado en que lo que sí se sabe "a la perfección" es que lo que más ha contribuido a la transmisión del coronavirus son los lugares cerrados, si bien ha insistido en que no se podrá saber el porcentaje exacto del evento que contribuyó más a que los españoles se contagiaran del virus.
La OMS da por buenos los datos
La OMS también ha dado por "buenos" los datos de fallecidos por Covid-19, la enfermedad que provoca el nuevo coronavirus, que les han facilitado las autoridades sanitarias españolas, a pesar de que la semana pasada se produjera un desfase entre las cifras que se dieron en España y las que registraba el organismo de Naciones Unidas.
El pasado jueves, 4 de junio, la OMS recogió 29.858 muertes por Covid-19 en España, en contraste con las 27.128 de las que informó el Ministerio de Sanidad, si bien horas más tarde, y después de que el departamento que dirige Salvador Illa aclarara que no reportaba al organismo datos diarios, modificó esta cifra para recoger una rebaja en el número de víctimas mortales hasta los 27.940.
Este baile de cifras se sitúa también en el escenario en el que tanto el Instituto Nacional de Estadística como el Sistema de Vigilancia de la mortalidad diaria (MoMo) del Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) hayan estimado un exceso de mortalidad en España de entorno a unas 43.000 o 44.000 personas.
"La semana pasada hemos tenido mucho intercambio de información con las autoridades sanitarias españolas porque ha realizado un ajuste en el número de fallecidos por Covid-19 y la OMS todavía no lo había volcado en su base de datos. Se aclaró y, por tanto, damos por buenos los datos aportados por las autoridades sanitarias españolas", ha dicho la directora de Salud Pública de la Organización Mundial de la Salud (OMS), María Neira.
En este sentido, la experta ha recordado que en el exceso de mortalidad no se pueden incluir sólo los casos de coronavirus, ya que es "muy probable" que muchas personas hayan fallecido, tanto en España como en el resto de países de Europa, por no haber ido al hospital buscar asistencia sanitaria por miedo a contagiarse del Covid-19 o porque los hospitales estaban saturados.
"Todo esto se va a saber y, para ello, las autoridades sanitaria deben analizarlo bien y comprobar a qué causas se ha debido el exceso de mortalidad y qué es lo que ha pasado", ha enfatizado Neira, para destacar que España está actualmente en una situación "muy interesante" respecto a la evolución de la epidemia y que demuestra que las medidas que se han adoptado han dado "resultado".
Dicho esto, la dirigente de la OMS ha asegurado que el sistema epidemiológico en España está "funcionando", dado que cuando se ha producido un "pequeño rebrote" se está detectando rápido. Además, ha comentado que a nivel hospitalario los casos son "mucho menos severos" y que los tratamientos están funcionando.
"El sistema sanitario español está ahora mejor preparado para actuar de una manera más rápida y eficaz en el caso en el que se detectara un pequeño brote", ha enfatizado. Asimismo, y a nivel general, Neira ha destacado que los "muros de contención" del virus que se han creado en los países europeos permite pensar que, aunque no se puede descartar una segunda ola, si se produce no se viviría una situación "tan dramática" como la ocurrida hasta ahora.