Portugal ha pasado de ser ejemplo de lo que se debe hacer frente al coronavirus a ser ejemplo de lo que no se debe hacer. La situación en el país vecinos se ha complicado y España debe aprender. Precisamente un médico español en Portugal ha dado algunas claves.
Ha sido en Espejo Públicodonde este jueves han entrevistado a Javier Gallego,un médico que trabaja como jefe del servicio de cirugía torácica del hospital Luisíadas de Lisboa.
Según Gallego uno de los grandes focos de contagio en Portugal han sido los transportes públicos. “Mucha gente cuando volvió a la actividad profesional en transportes públicos... había tal vez un exceso de confianza y falta de algunas medidas básicas como la mascarilla”, ha señalado.
Sin embargo ha matizado que los focos de contagio se están dando más en gente joven, entre los 20 y 30 años, que “han salido a la calle, han organizado reuniones de más de 10 personas, prohibidas en este momento”.
También ha explicado como la enfermedad está afectando más a los jóvenes. La gravedad de los contagios está siendo “menos importantes” que en los pacientes de más edad, por lo que los hospitales, salvo excepciones, no están al límite de su capacidad. “Pero son un medio de transmisión, por lo que la situación es grave”, ha insistido.
“Portugal, inicialmente, fue un ejemplo a nivel europeo, pero en este momento tiene que servir de ejemplo a otros países, como España, para no confiarse porque ya que Portugal supo ver el problema cuando sucedía en España y en Italia y supo tomar medidas a tiempo. Tal vez en este momento Portugal puede ser un ejemplo para que los otros países no se confíen, no volver a hacer una vida completamente normal”, ha asegurado Javier Gallego.